Tras eliminar a Independiente, Municipal Limeño se ganó el derecho de disputar la final del Torneo Apertura de Segunda División, instancia donde se enfrentará a un Fuerte San Francisco que dejó en el camino a 11 Lobos.
Los cucheros, que habían perdido 2-1 en la semifinal de ida, lograron remontar el marcador tras imponerse por 2-0 en el tiempo extra del partido de vuelta, disputado el domingo por la tarde en el estadio Ramón Flores Berríos. Los autores de los tantos que dieron la clasificación fueron Pastor Melgar y Roberto Álvarez, siendo este último quien comentó que, a pesar de la situación, no se atreven a celebrar nada.
En entrevista con Cadena Monumental, el juvenil comentó que llegar a la final eran uno de los objetivos que se habían trazado desde el arranque de la temporada. “La clasificación era lo que nos habíamos propuesto desde el inicio del torneo y gracias a Dios se logró, pero no se ha ganado nada, es solo un peldaño más. La hora de la verdad serán los otros dos partidos (de la final) que tenemos y que debemos afrontar con mayor responsabilidad”, comentó el macizo.
En el partido del domingo Limeño tuvo la opción de definir todo con un penal ejecutado en el tiempo extra por Cristopher Galeas, pero este falló, pero aún así el equipo oriundo de Santa Rosa de Lima no aguadó las piernas. “Dios sabe porqué hace las cosas, y si esa no era la opción de anotar (penal) no se iba a dar, pero sabía lo que tenía para nosotros”, agregó el jugador.
Sobre la final, que se jugará a partido ida y vuelta, Álvarez dejó claro que no llegarán con aires de grandeza. “Sabemos de la magnitud del partido, pero nosotros vamos a hacerlo con la mayor responsabilidad, sabemos del equipo que tenemos, pero principalmente vamos a dejarlo todo en manos de Dios”, finalizó.