STUTTGART. La marca alemana Porsche ha anunciado este martes que junto al cambio de modelo para 2016, los nuevos nombres para sus deportivos de dos puertas y motor central serán 718 Boxster y 718 Cayman.
La designación 718 del fabricante de automóviles de Stuttgart hace referencia a los innovadores deportivos de 1957 que obtuvieron grandes éxitos en las más reconocidas carreras automovilísticas.
Según un comunicado oficial de la firma alemana, los 718 Boxster y 718 Cayman tendrán ahora muchas similitudes –tanto visuales como técnicas–. En el futuro, ambos contarán con potentes motores bóxer de cuatro cilindros sobrealimentados por turbo. Tal como se aplica para los modelos 911, el Roadster será posicionado con un precio más alto que el Coupé. Los nuevos 718 Boxster y 718 Cayman llegarán a América Latina y el Caribe en la segunda mitad del 2016.
La gama 718 es una continuación del experimentado concepto de cuatro cilindros y de la historia de los reconocidos deportivos Porsche. El ejemplo más reciente es el prototipo de carreras 919 Hybrid, de la categoría LMP1, que también tiene un muy eficiente motor de cuatro litros sobrealimentado por turbo y con sólo dos litros de cilindrada. Con él, Porsche no sólo logró el primero y segundo puesto en las 24 Horas de Le Mans de 2015, sino que también ganó los títulos de constructores y pilotos del Campeonato Mundial de Resistencia (WEC) de esta temporada.
Historia del 718
Los motores bóxer de cuatro cilindros tienen una larga tradición en Porsche –y han disfrutado de increíbles éxitos–. A finales de la década de los años 50, el 718 –un sucesor del legendario Porsche 550 Spyder– representó el nivel más alto en la configuración de motores planos de cuatro cilindros.
El Porsche 718 se impuso frente a numerosos competidores con su potente y eficiente motor plano de cuatro cilindros bien fuera que estuviese compitiendo en las 12 Horas de Sebring en 1960 o en el Campeonato Europeo de Montaña, que fue llevado a cabo entre 1958 y 1961. El 718 también obtuvo el primer lugar en tres ocasiones en la legendaria carrera italiana Targa Florio, en Sicilia, entre 1959 y 1960.
En las 24 Horas de Le Mans de 1958 el 718 RSK, con su motor cuatro cilindros de 142 caballos de potencia, se anotó una distinguida victoria en su categoría.