Como ya es más la costumbre para instancias finales entre equipos de Liga Mayor, Alianza entrenó hoy a puertas cerradas por segundo día consecutivo en el estadio Cuscatlán. Este fue el penúltimo entreno de la semana de los capitalinos previo a la final del Torneo Apertura ante FAS.
Los paquidermos no dejaron ver ni un minuto de su sesión, aunque en la ya tradicional Lomita de la colonia San Franciso, detrás del Coloso de Montserrat, se pudieron apreciar algunos movimientos del calentamiento.
En cuanto al parado táctico, Rubén Alonso, míster aliancista, mantiene fija su idea de jugar con el 4-4-2 que le ha dado resultados en esta segunda fase. Salvo algún percance de última hora, los capitalinos presentarían casi el mismo equipo que alineó ante Águila el sábado, aunque con Rodrigo Rivera y Herbert Sosa en vez de Isaac Portillo y Tony Roque, respectivamente.
Espera brillar
La esperanza de Alianza en esta final radica en la defensa. Uno de sus zagueros, el colombiano Iván Garrido, espera cumplir tras un torneo de debut en El Salvador lleno de emociones y coronarse con un título.
“Al principio cuesta un nuevo equipo, un nuevo fútbol, compañeros, rivales… Tenés que acomodarte, pero ha sido una experiencia positiva. He jugado casi 95 por ciento de los partidos y he contado con buena salud y el rendimiento ha sido cada vez mejor”, confesó el central cafetero.