La desilusión reinó en el banquillo de FAS, una vez el árbitro Jaime Herrera pitó el final del campeonato. No solo por el resultado, ni siquiera por el rival que les privó de la corona, sino porque la sequía de títulos nacionales se ampliará a, por lo menos, seis años y medio para este próximo torneo.
El gol que recibieron al minuto 56, obra de Ramón Martínez de Paz, fue a balón parado y los jugadores santanecos admitieron su culpa en esa jugada pese a que ya habían ensayado en la táctica fija.
“Fue desconcentración, lo habíamos trabajado. Justo al centro, justo a que teníamos que estar en zona y que teníamos que marcar así. En esa pifia se nos va el gol, se nos va el partido. No pudimos tampoco ser contundentes con las oportunidades que tuvimos”, resumión Cristian Álvarez, centrocampista fastaneco.
“Se nos sigue negando. Hay que seguir trabajando, algo no estamos haciendo bien. Hay que tener las ideas claras luego de que pase esto de la final y el próximo torneo preparanos, quizás el doble de lo que hicimos en el pasado”, agregó el portero Adolfo Menéndez.
Lo que queda en el cuadro occidental, por ahora, es pasar la página. Se viene el torneo Clausura 2016 este 9 de enero y los jugadores felinos desde ya quieren pensar en la copa 18 este semestre.
“Hay que darle a Dios por todas las cosas. Él sabe por qué lo hace, pero ahora debemos pensar en lo que viene… Quiero agradecerle a toda esta gente”, manifestó por último Walter “el Pery” Martínez, delantero hondureño.
Manchado de violencia
El entrenador de FAS Agustín “Chochera” Castillo fue uno de los que más sufrió la derrota de su equipo. En la décima final de su carrera como técnico, el peruano tuvo emociones encontradas durante todo el encuentro, pero todo acabó mal tras un pequeño altercado con seudoaficionados de FAS que, desde la tribuna sur del estadio Cuscatlán, lo increparon tras encajar el 1-0.
Tras cruzar palabras con algunos seguidores, supuestos hinchas agredieron al entrenador fasista al lanzarle desde los graderíos alguna especie de líquido, obligando al profesor a cambiarse la camisa que estaba vistiendo. Agentes de la Policía Nacional Civil (PNC) intervinieron y retiraron de la tribuna a algunos de estos aficionados.
Al finalizar el partido, Castillo abandonó el banquillo sin brindar declaraciones a los medios. Tampoco subió a la tarima a recibir su medalla.