Arturo Álvarez es uno de los pesos pesados en la Selección. Su camino con el azul y blanco inició en 2007, con Carlos De los Cobos como técnico, y su voz tiene autoridad dentro del grupo. Ser un referente no le pone más presión al habilidoso volante, quien se ha mostrado tranquilo en las horas previas a este decisivo partido contra Curazao.
“Vamos a tener que salir bien enfocados, tenemos que dar todo, este equipo de Curazao no va a ser fácil”, avisa el ex mediocampista de FC Dallas, Terremotos de San José, Real Salt Lake, Pacos de Ferreira y Videoton, su último equipo en Hungría.
En este momento, Arturo no tiene equipo y “el Zarco” ha dicho públicamente que el volante está “para 30 o 35 minutos”, y no para un partido completo. El jugador lo asume, pero avisa que ha tomado las medidas para no bajar su nivel futbolístico y poder aportar lo suyo.
“Desde que salí de Videoton me he preocupado por estar bien en lo físico, me he estado entrenando para no perder la forma de manera personal, y estoy listo para darlo todo en el juego”, comenta el seleccionado, que a sus 30 años podría recalar en la MLS.
Álvarez pide no fiarse del rival y tomar el juego con responsabilidad. Curazao “es un equipo que tiene varios jugadores en Europa, y esperamos un partido difícil. Es un equipo que se basa en el contrataque y vamos a tener que estar bien parados”.
Tanto el volante como el resto del grupo espera sacarle provecho a los cinco días que llevan en la isla caribeña, para aclimatarse al lugar y también al pasto sintético del Ergilio Hato. Para eso “hemos estado entrenando en una cancha similar (el complejo Jo Matilde), y esperamos que todo nos salga bien”, se despide el jugador, con la mente enfocada en seguir dándolo todo por los colores nacionales, esos que siente como propios aunque haya nacido en Houston.