Más que lamentarse por las decisiones arbitrales, Alianza se mantuvo ecuánime tras un amargo 0-0 contra su vecino, Atlético Marte. Sin embargo, les toca analizar el partido a la luz de las expulsiones de Rudy Valencia y Rodolfo Zelaya (minuto 60), que a su juicio condicionaron el resto del partido.
El técnico albo Rubén Alonso, por ejemplo, analizó el encuentro a partir de los últimos minutos, donde su equipo sufrió y lamentó el resultado.
“Los dos buscamos el gane, pero ya en un partido accidentado y con cuatro expulsiones se hacía difícil armarlo. Quisimos armarlo, pero no pudimos y tuvimos un partido monótono después, ir y venir sin sentido los dos equipos. Pudo haber un gol, pero a la larga el empate… no perdimos, pero perdimos dos puntos porque estamos de local”, comentó el míster uruguayo.
Por su parte, el volante Rodrigo Rivera fue enfático con las incidencias que provocaron las expulsiones, aunque tampoco se privó de reconocer la altura del rival de turno.
“Creo que de local tenemos que ganar siempre, por ahí las expulsiones arruinaron un poquito el espectáculo y arruinaron mucho la idea que traíamos de jugar. Hubo muchos espacios y por ahí los compañeros supieron manejar eso, nos esforzamos. Hay que darle mérito al rival, que se vino a parar bien en la cancha”, expresó el capitán de los paquidermos.
Sobre las tarjetas rojas a sus compañeros, Rivera externó: “No me fijé bien, no sé qué criterios tomó el árbitro para expulsar a Fito y a Rudy, creo que tampoco los pudo expulsar así por así… Creo que con los árbitros no hay que meterse, hay que respetar su trabajo y nosotros tenemos que hacer el nuestro”.
Sólidos
Atlético Marte, en cambio, rescata de ayer el que fue su tercer partido consecutivo sin permitir gol, el cual es un contraste importante con los primeros cuatro juegos del torneo (donde recibieron ocho goles).
El capitán carabinero, Léster Blanco, explicó que “manteniendo la meta a cero vamos sumando, va a llegar un momento en el que vamos a anotar, sea yo o el que sea”.
Sin embargo, Blanco tampoco repara en la sequía goleadora de su equipo (un gol en los últimos seis partidos). “La verdad, no me quita el sueño, no me interesa lo que se pueda decir, yo estoy aquí para colaborar al equipo. No hay conformismo ni mediocridad, vamos a ir despacio porque esto es muy largo”, sentenció el delantero.