El campeón ha perdido el respeto, y desde hace rato. Sumó una quinta derrota (la cuarta como visitante) y le sirvió de escalera a uno de los que, antes de la fecha, era de los sotaneros. Chalatenango, con gol de Bladimir Díaz al 42? y José Rodríguez al 88?, le dieron el segundo triunfo en casa a su equipo que volvió a sentir el aliento en la grada.
El partido comenzó con precauciones para los dos equipos. Tecla buscó salir en bloque, con pases cortos pero fue hasta el minuto 4 que Juan Barahona pudo probar a marco pero desviado porque los norteños no daban facilidades al fondo.
Chalate, a la contra, dependía de la creatividad de Pablo Hütt para abrir la cancha y al 6? prolongó para Carlos Ayala, pero éste se resbaló y no tuvo brújula su disparo y dos minutos después en jugada individual, Óscar Rodríguez envió un tiro cruzado y desviado a la entrada del área grande. Eran avisos.
El partido tuvo emoción, para los de casa, al 14? cuando Gerson Mayén erró un pase y por apoyarse en Roberto Domínguez le cedió el balón a Bladimir Díaz, quien se encarriló hasta el área y en dos remates exigió al portero Cruz Trinidad.
En la contra, Tecla respondió con un remate violento de Ricardinho que cobró altura. Sirvió para quitarse la presión.
Pero al 18? se vino una ocasión clara de gol para los alacranes. Samuel Kordell centró al área para Díaz, quien ganó en salto a Mancía pero fue “Trini”, quien salvó con un desvío cerca del poste izquierdo.
Al 22? se vino un tiro libre para Chalate, cobrado por Hütt y en la recepción Díaz estuvo cerca de marcar pero se enrredó con un defensor tecleño. Estaba más cerca del gol los morados que el campeón.
Antes de cumplirse la media hora, Tecla pudo marcar de carambola. Tras un tiro libre de Barahona, Giménez desvió suave el balón y lo estrelló en el poste izquierdo. Salvada para el local.
La presión de Chalate era abismal y el gol tarde o temprano tenía que caer y llegó al 42?. En una jugada a balón parado, Hütt se la dejó servida en bandeja de plata a Díaz, quien definió de cabeza. Ese tanto lo venía buscando el colombiano, su tercer tanto del torneo.
Para la segunda mitad, Tecla era el presionado y por eso “Pichi” envió dos cambios rápido: Irvin Herrera y Aldair Rivera pero Chalate estaba bien parado al fondo, sus defensas preferían el pelotazo a salir jugando a ras de piso.
En esos pases largos, producto de un rechazo, Samuel Kordell se encargaba de de iniciar la contra. Al 62? un pase del trinitense para Díaz terminó en Óscar Rodríguez, quien quiso colocar el balón al rincón bajo del poste derecho pero desperdició esa acción.
Tecla tenía más la pelota pero su ataque no era profundo y le costaba abrir al rival. Chalate quiso mantener presencia arriba y al 70? llegó Manuel Otero por “Rapado” Ayala. Cuatro minutos después, Otero salió del partido por un cortadura en la cabeza, tras chocar con Mancía. Su camisa tenía sangre y para que volviera se la lavaron porque no tenían otra, volvió al campo pero con la cabeza vendada.
Chalate picó de nuevo al 88? en una contra del “Perico” Rodríguez, quien con remate cruzado venció a Trinidad. Era el 2-0 de la fiesta en El Sombrero.
Tecla no tuvo puntería y sin gol es imposible revetir el bache de resultados. Aunque no pase por buen momento tendrá que levantar el ánimo rápido. En dos días recibe al Real Salt Lake por Concachampions y una derrota allí lo elimina de esa competición, a falta de un partido.
La sal para la visita
Un aficionado colgó una piñata con forma de alacrán en la malla ciclón, justo detrás de la banca de suplentes del Santa Tecla. Incluso, por ser el mes de la Independencia, le pegaron sobre la cola una bandera de El Salvador. El motivo, que sirviera de sal para el rival.
Una afición que sí es fiel
Pese al mal momento que venía arrastrando el conjunto norteño, su afición volvió a demostrarle el apoyo incondicional, en especial por el sector general. Hubo ambiente allí con máscaras, bombos, cantos y hasta simularon la marea en la grada, esa que se observa en los juegos de Selección. Tampoco faltó el papel cortado y los rollos de contómetro.