A mediados de junio de 2003, el Águila terminó relación con Ramón Maradiaga, por una presunta actitud desleal del preparador físico Ricardo Ángeles, que fue acuerpada por el candidato a seleccionador de El Salvador, y que desembocó en la ruptura del contrato con ambos, según los registros de El Diario de Hoy de esa época.
La situación se dio en la gira que Águila realizaró en Texas, Estados Unidos, en la que Ángeles y Maradiaga no regresaron con el equipo y el preparador físico se fue a Washington para poner en mal predicado al equipo migueleño con un contratista.
“Le pedimos explicaciones a Maradiaga y nos dijo que apoyaba a su compañero y que si él no era contratado renunciaba, así es que se la aceptamos”, dijo tajante Alejandro González, por entonces, presidente del Águila.
Maradiaga terminó séptimo en el Clausura 2003. En 18 juegos apenas ganó 6, empató 4 y perdió 8. Sumó 28 a favor por 27 en contra.