La paliza del miércoles pasado en Las Delicias (5-2) contra Santa Tecla caló hondo en la interna de Alianza, y Rubén Alonso no se la quiso jugar otra vez y cambió a toda su zona defensiva, a excepción de Danny Torres. Esa nueva fórmula le sirvió y terminó ganando 1-3 a la UES en condición de visitante. Ese triunfo le sirve para mantenerse en la tercera posición, con 20 puntos.
El juego no comenzó con buenas noticias para los albos, ya que en el minuto 4 Herbert Sosa saltó a pelear una pelota con Eder Renderos y el capitán albo se llevó la peor parte, al caer mal y doblarse el tobillo izquierdo. Cuatro minutos (8’) después de ser atendido e intentar regresar al juego, volvió a tirarse al césped y tuvo que ser sustituido por José Orellana.
Con la llegada del habilidoso zurdo, los albos ganaron presencia y llegadas por su banda, pero perdieron en el medio campo y se tuvo que cambiar la idea original de juego que planteó el uruguayo Alonso.
Todavía asimilaban la idea de que tendrían que hacer frente al juego sin Sosa y cayó el primer gol de la UES, con la firma de un exalbo: Carlos Aparicio sacó un potente disparo de pierna izquierda que se le escapó de las manos a Élmer Iglesias.
Los fantasmas de una nueva derrota rondaban otra vez en Alianza, que necesitaba lavar las heridas que le dejó la goleada que le propinó el Santa Tecla entre semana en Las Delicias. Y tocó remar contra la corriente, pero supieron manejar el partido y al 15’ tuvieron la más clara tras un centro de Rodrigo Rivera desde la izquierda que solo pudo rozar Juan Carlos Portillo. Primer aviso a Douglas Batres.
Al minuto 20 fue Fito Zelaya el que asustó con un tiro libre frontal que se fue unos centímetros arriba. Alianza no desesperaba, la UES llegaba poco, pero seguro.
Hasta el 27’, todas las aproximaciones se habían dado por la izquierda con la buena relación que mantuvieron Orellana y Flores Jaco, pero llegó el momento de cambiar y en un intento de centro, Marcelo Posadas se encontró con una desafortunada pelota que le pegó en la mano y se sancionó penalti. Zelaya fue el encargado, pero la tiró arriba y provocó la silbatina de los pocos aficionados académicos.
Lo de los pumas seguía siendo poco, pero ordenado, con pocos hombres en el frente. Roberto “Toro” González intentó, al 32’, con un tiro de larga distancia que obligó a Iglesias a seguir la trayectoria gateando, por suerte se fue desviado del marco.
Al minuto 34 llegó el premio para un Alianza que estaba haciendo bien las cosas, una combinación certera y como si fuera de memoria entre Orellana y Flores Jaco, terminó en un centro que conectó Portillo en el segundo poste y sin chance para Batres para evitar el gol del empate (1-1).
Todo o nada
Con el sinsabor de que se pudieron ir al descanso ganando con el penalti que erró Zelaya y un gol anulado a Danny Torres, al 39’ por posición adelantada, el primer cuarto de hora del segundo tiempo fue a puro trámite, sin llegadas de peligro que inquietaran a los guardametas.
Pero al minuto 60 William Mancía se metió hasta la cocina de los albos y por hacer una de más, Flores Jaco le arrebató la pelota. La segunda importante y de peligro fue 10 minutos después (70’) por intermedio de Ronald Ascencio, pero su disparo se fue arriba.
Fue el turno de Alianza, que ya con David Díaz en el campo intentaba buscar la victoria. El 9 de los capitalinos hizo la jugada individual, pero la concreción no fue la mejor.
De las últimas que tuvieron los académicos fue de “Toro” González con una media chilena que levantó de sus asientos a los aficionados, pero la pelota se fue apenas arriba. Un minuto después, el mismo delantero tuvo su última oportunidad dentro del área, pero la estrelló en el cuerpo del meta Iglesias.
Se pensaba en un empate de 1-1 como final y que la UES apagaría una racha de cuatro derrotas consecutivas, pero al minuto 87 otra mano dentro del área, esta vez de Wílmer Henríquez, se sancionó el segundo penalti del juego. Fito Zelaya al cobro y el 1-2 que estaba dando el triunfo.
Conformados todos con ese resultado, pero Alianza buscó dar el golpe de gracia, el que se concretó al 90+2 con otra buena jugada de conjunto entre Rivera y Zelaya, que firmó Juan Carlos Portillo con un sendo zapatazo cruzado que dejó sin chances al guardameta Douglas Batres.