El esperado regreso y la mejor bienvenida. Los 25 atletas que representaron a El Salvador en los Juegos Mundiales de Los Ángeles ya están en casa. Y fueron recibidos como campeones.
Sin poder participar de la ceremonia de Clausura porque no lo permitía el horario del vuelo y tras un largo viaje desde California, los atletas estaban cansados pero la felicidad no se tomaba respiro. Muchos no aguantaban las ganas de volver a estar en sus casas y de ver a sus familias.
Así como el avión en el que viajaron en la ida estaba lleno de ilusiones, este avión de regreso retornó cargado de medallas. Se las dejaron subir en el equipaje de mano y muchos de ellos viajaron con las preseas colgadas al cuello. Después de todas las alegrías vividas en Estados Unidos, faltaba una más: el gran recibimiento que tuvieron en el aeropuerto de Comalapa.
Decenas de familiares, amigos, colaboradores y aficionados le dieron un caluroso recibimiento cuando aparecieron. Hubo reencuentro, emociones y lágrimas. Los Juegos Mundiales habían terminado de la mejor manera y hoy pasan a ser uno de los mejores recuerdos de sus vidas.
No terminaron ahí los homenajes. En el Hotel Marriot de La Gran Vía, la empresa Digicel les organizó un desayuno de bienvenida y les entregó nuevos premios a todos los integrantes del equipo. Otro trofeo más a la colección de los campeones.
Terminó Los Ángeles 2015 pero la actividad salvadoreña de Olimpíadas Especiales no se detiene. Se vienen en el futuro los Juegos Nacionales y el año próximo los Juegos Latinoamericanos de Costa Rica. Esta organización, que crece cada día, no se descansa en el trabajo con los niños y muchachos con capacidades diferentes. La tarea continúa y los sueños se renuevan…