SAN MIGUEL. Marte ardió en llamas. Dragón lo quemó. No solo eso, lo achicharró. El domingo, en el estadio Barraza, los mitológicos no solo se divirtieron, también pusieron un festín (5-1) a Atlético Marte. El cuadro bombardero, con errores defensivos, cedió todo para que los “escupefuegos” hicieran del domingo una tarde memorable.
El brasileño Jackson De Oliveira se convirtió en el hombre que guio a los migueleños a la victoria, detrás de todo un equipo que también supo frenar los intereses marcianos de sumar como visitante.
A los dos minutos, ya Dragón se hacía sentir. Un robo de balón de Wilman Torres, por sector central, y una asistencia a Héctor Lemus, terminó en nada, después de que el colombiano mandara su remate a las nubes. En intención, Dragón era más inteligente, ya que logró que Marte tocara por bajo, mientras el equipo tomaba la iniciativa y seguía yendo al frente. Lemus volvió a tener presencia, tres minutos después, entre dos marcas, pero terminó siendo frenado.
Por su parte, los capitalinos llegaban con pelotazos largos, para tratar de buscar a Léster Blanco, prácticamente solo en punta. Además, Edwin Sánchez, con mucha movilidad, sabía moverse bien por los dos frentes y acompañaba para recoger balones desde el medio, generando una salida más fluidez. Por su parte, Eduardo Merino, por la banda derecha, y Mauricio Chavarría, pegado a ese sector, intentaba seguir las prolongaciones, pero perdían sus duelos ante Josué Hernández y Gerson Serpas.
Los mitológicos, con mayor tranquilidad, marcaban las pausas y los tiempos y no estaban dispuestos a renunciar a la peligrosidad. La forma en la que estaban siendo frontales terminó por romper el cerrojo del marcador y demostró la fragilidad que tenía la defensa marciana.
Fue a los 17’ en que la dupla sudamericana dio resultado. Una incursión desde la derecha De Oliveira, quien dejó en la marca a Mario Martínez, hizo el quiebre y observó la incursión del cafetero, centralizó para que el Lemus con velocidad llegara solo a rematar (1-0).
Dos minutos después, se repitió la misma jugada, pero con papeles invertidos. No pudo Romeo Monteagudo parar la marcha rival, pero salvó a Marte que no llegó a tiempo De Oliveira para definir el segundo que hizo llegarle Lemus.
En ese tramo del juego, volvió a aparecer Marte con un remate bajo a puerta de “Inter” Sánchez (21’), que sacó a una mano González y envió al tiro de esquina. Después, sin bajar los brazos, sería Ricardo Alvarado (28’) el que probaría con un remate largo, que no pudo atajar Meme
González y de pecho mandó afuera. A pesar de la forma en la que estaba intentando atacar, levemente, Marte siguió pasándola mal. Y tuvo que encajar el segundo.
Encontrando la forma en cómo cambiar y rotar en el ataque, De Oliveira volvió a dominar por derecha, superó a Néstor Asprilla y a la salida del portero Dennis Salinas, culminando con un remate a media altura directo a la red (30’).
Se estaba divirtiendo Dragón, dejando buen espectáculo, y el cuadro carabinero apelaba a la labor de “Inter Sánchez, quien a los 33 minutos cobró un tiro libre, al que de nuevo voló y con una mano Meme lo mandó detrás de su portería.
Llegaría un cierre de primera parte en todo su esplendor. Marte logró acercarse y anotó el 2-1, gracias a un remate de Eduardo Merino, que recibió un centro y frente a la portería, sin marcas, remató de derecha, el balón picó y se metió a la red, ante la mirada perdida de González (42’).
Sin mucha celebración, treinta segundos después, llegó la contra y el tercero “escupefuego” con De Oliveira, que con la mala ubicación de Salinas y la mala marca de Mario Martínez, terminó en la prolongación en propia puerta de éste último al fondo (3-1).
Más “carnaval”
Ante el mal panorama que estaba a travesando, el técnico Carlos Meléndez tuvo que mandar dos cambios, uno sobre todo para levantar la última línea, llegando así Marcelo Tejeda. Por el carril derecho, llegó también José Luis Amaya. Diez minutos después, también ingresó Francisco García, para poner una cara más reforzada y buscar de alguna manera el empate.
Los mitológicos no retrocedieron líneas, pese a que Marte carburó mejor y puso otra revolución en su salida y en lo defensivo. Si bien Dragón demostró superioridad, era el momento en que los marcianos estaban logrando equilibrio y salieron a buscar el partido.
Esto permitió un disparo de Sánchez, potente de media distancia, que terminó en un suspiro en los aficionados, al irse arriba del travesaño. La insistencia dejó a Marte más posibilidades que las que creó en el primer tiempo, y le permitió jugar con opciones en varios tiros libres y de esquina. Pero los migueleños tuvieron a un Meme inspirado, que rechazó todos los peligros.
Del mismo modo, el ingreso de Ricardo Orellana le dio fuerza y velocidad al equipo, y su perfil le dio mejor movimiento y acompañamiento a De Oliveira. Así, (69’) Jackson volvió a hacer de las suyas. Una prolongación de Orellana se combinó con la velocidad y el dominio, hasta el fondo, del brasileño, quien por banda izquierda metió un remate cruzado para el cuarto (4-1).
Después, fue complicado detener a De Oliveira, que probó en al menos tres ocasiones más disparos a puerta, uno de cabeza bastante cercano para ser el quinto. Marte había perdido su órbita y gravitaba con poco menos para perder y con un riesgo mínimo al ir adelante, no logrando parar el vendaval local.
Dragón se despidió, tocando y dando deleite a su afición, haciendo real que no hay quinto malo. De Oliveira jugó con Torres, éste se metió con balón dominado entre los centrales y remató a marco el 5-1 (81’). Dragón se despidió con tres puntos y cientos de “ole” desde los graderíos, sumando seis unidades y dejando un domingo de goleada con mucha samba.