BERLIN. La Juventus de Turín dará la batalla en el mediocampo, mientras el Barcelona se imagina un partido con el dominio de la pelota y sobre todo las áreas, tanto en defensa como en ataque. Pero el guión de la final de la Liga de Campeones del sábado no está escrito.
El campeón, eso sí, firmará el triplete y la temporada perfecta, porque Juve y Barsa se presentan en el estadio Olímpico de Berlín como campeones de Liga y Copa en sus respectivos países. Sería la quinta Copa de Europa para el Barsa, cuarta en la última década, y la tercera para la Juve.
“El equipo está donde quería estar, con dos títulos conquistados y con la posibilidad de entrar en la historia del club con un triplete que solo se ha logrado una vez (2009)”, dijo el técnico español Luis Enrique en la víspera.
“Uno de los dos equipos va a hacer el triplete. Queremos ganar la final, independiente de que ya hemos hecho un torneo extraordinario”, comentó el entrenador de la Juve Massimiliano Allegri.
La Juventus se ha atribuido el papel de cordero, entregando la condición de favorito al Barsa. Allegri admitió que la voracidad ofensiva del tridente formado por Lionel Messi, Luis Suárez y Neymar “con 120 goles esta temporada” es difícil de contener, pero tiene un plan para intentar frenarlos.
La pizarra sugiere que las ayudas del chileno Arturo Vidal, Paul Pogba y Claudio Marchisio serán determinantes para desequilibrar al rival y abrir las puertas a un gol.
“El termómetro del partido va a estar en el mediocampo”, explicó Allegri, dejando entrever cómo tiene pensado descompensar al Barsa. “A partir de ahí hay que asumir que el partido no va a terminar 0-0, así que hay que marcar un gol”.
La teoría dice que el mejor escenario para la Juve sería adelantarse en el marcador y luego enfocarse en contener al rival.
“Este partido tenemos que ganarlo en el medio del campo, donde podemos hacer defensa de calidad y defensa física”, señaló el central Leonardo Bonucci. “Hemos llegado a este punto sabiendo que estamos un peldaño por debajo del Barcelona, pero en una final las diferencias se esfuman”.
Bonucci estará acompañado en el centro de la defensa por Andrea Barzagli tras la lesión de Giorgio Chiellini. El arquero Gianluigi Buffon, capitán y referente del club, aseguró que el equipo ya trabajaba en mejorar su competitividad a nivel europeo, pero que quizá esta final ha llegado demasiado pronto.
Esto dicen los protagonistas:
“Desde el punto de vista objetivo, el Barcelona parte como favorito porque tiene jugadores magníficos a nivel individual. Un equipo con Messi, Suárez, Neymar y (Andrés) Iniesta por detrás es imposible que no sea favorito”, aseguró Buffon. ”Pero tampoco vamos a ser víctimas esperando un sacrificio”.
“Nosotros los italianos nos volvemos fuertes en los momentos de dificultad. Somos un gran equipo y vamos a hacer todo lo necesario para ganar esta Champions”, añadió Bonucci.
El Barcelona no se confía. El espíritu del vestuario azulgrana lo describió el central Gerard Piqué en una sola frase: “Si somos mejores hay que demostrarlo”.
Luis Enrique dijo que la plantilla se prepara para una batalla. En el partido que dibuja todo entrenador en su mente, quiere al Barsa con el dominio y la posesión del balón. Y prevé una Juve capaz de ofrecer dos caras: una defensiva y de repliegue y otra de toque más ofensiva, si así lo requiere el juego.
“Imagino un partido en el que tengamos el balón más que el rival y estemos más en campo contrario, siempre a un alto nivel”, explicó. “Seguro que vamos a tener dificultades. La Juventus tiene muchos recursos, y por eso está en la misma situación que nosotros con la posibilidad de hacer el triplete”.
Neymar ha dicho que, ”Buffon es un gran portero. Soy un fan suyo pero mañana sería feliz si le puedo marcar”. No cambiaré mi manera de jugar en el campo. Seguiré igual para ayudar a mis compañeros” .
Gerard Piqué en tanto aseguró que ”Si queremos ser los mejores lo tenemos que demostrar y mañana es el día”. “¿Qué tiene de especial este equipo? A Leo, a Luis, a Ney, a Andrés… Tenemos un equipazo”.