Faltan aún cosas por saber en esto del escándalo en la FIFA. Falta conocer más implicados en la trama de sobornos, compra de voluntades y todas las linduras que eran secretos a voces en el ente rector del fútbol mundial. Falta que ver cómo salimos nosotros (ojalá que no) untados en esto. Falta, y esto lo deseo con mucho anhelo, cómo nos recomponemos y retomamos el camino con un nuevo presidente que no venga a comprar voluntades para dirigir el fútbol mundial.
Ya es tiempo de que dejemos atrás a Blatter y todas las linduras que hizo el suizo al mando de la FIFA. Quizás no tengamos voz en el área, pero la lucha se puede hacer para llevar en la región la iniciativa a la hora de exigir al organismo transparencia, y no ser borregos y votar a ciegas por una persona solo porque la Concacaf así lo pide.
De ahora en adelante, hay que votar por proyectos, no por afinidades. Hay que votar para traerle un verdadero desarrollo al fútbol nacional; y no sólo un auditorio o una cancha. Blatter ya es historia (ojalá) en la FIFA y quizás en El Salvador, donde siempre le rindieron algo menos que pleitesía nuestros dirigentes. Ahora hay que intentar, desde nuestra muy humilde posición, tratar de llevar aires frescos al organismo a través de Concacaf. Ya es tiempo de que tomemos protagonismo.