Roca: “St. Kitts era un lobo con piel de corderito”

El DT de la Selecta pide no menospreciar al rival ya superado, y alista lo que viene: Copa Oro y próxima fase a Rusia 2018. Lamenta una "presión añadida" desde los medios, y señala más reflexión ante nuestra realidad futbolística.

descripción de la imagen
Foto Por edhdep

Por Carlos López Vides - Twitter: @Celvides

2015-06-18 1:31:00

Albert Roca está de buen humor. Participa del seminario de su amigo y colega Francesc Morera, quien es preparador físico del Barcelona de Luis Enrique, un cargo que tuvo Roca cuando el principal era Frank Rijkaard. El seleccionador está de buenas y hasta hace de juez para que Morera sortee algunas prendas oficiales del Barça en el auditórium Joseph Blatter, en el último día del seminario impartido por Morera. Le cambia un poco el rostro al ser abordado por El Diario de Hoy, pero acepta una charla de pocos minutos. La conversación se extiende a más de 20. Quizá el buen humor ya no está más, y el míster ocupa lenguaje altisonante en algunos tramos de la entrevista. Pero no elude ninguna pregunta en esta charla, exclusiva y uno a uno, sobre los temas más picantes alredor de la Selecta. 

¿Qué análisis hace, en frío, de la serie con St. Kitts y Nevis?
En el partido en el Cuscatlán teníamos que ajustar cosas. En la primera parte hubo un momento en que se pierden balones, que las combinaciones no son las mismas. Tenemos que mirar el por qué. No me gustaría hablar de justificaciones o excusas, sino explicaciones a nivel técnico de lo que podría pasar. Hay conclusiones. Una: a lo mejor el sistema que estamos intentando emplear contra un equipo no lo hemos visto muchas veces, porque con los contrarios contra los que nos hemos enfrentado (España, Argentina, Colombia, Chile…), desgraciadamente la posesión del balón no ha sido nuestra. Otra: el propio partido. Es complicado ante tanta responsabilidad, de estar o no estar (en la próxima fase al Mundial); los jugadores no tuvieron ese ajuste para hacer el pase tan adecuado siempre. Hay nervios en jugadores jóvenes, como los que tenemos. Otra causa: El equipo contrario, que no te deje, que sea muy fuerte, te hace impreciso porque su radio de agresividad con el jugador no se lo permita, que esa cercanía sea por encima del nivel a lo que nuestro jugador está habituado. 

¿Qué tan cerca o lejos está la Selección de lo que usted busca en su idea de juego?
Un poquito más. Es imposible decir ‘en tanto por ciento’, el fútbol no es una ciencia cierta, que pueda decir ‘me faltan 25’, o ‘me faltan 87’. El tema es que veo evolución. 

¿Pero cómo explicarle esta evolución que usted mira a la afición?
Es difícil medirla. Nosotros mejoramos cuando podemos hacer fogueos contra equipos que nos permiten que esa velocidad se pueda dar, que cada vez estemos menos nerviosos, que tengamos seguridad en nuestras capacidades, que haya más conjunción; cosa complicada en una Selección, porque no siempre juegas con ese jugador, porque son de equipos diferentes. Son complejidades que tenemos que ir resolviendo. 

… Y en poco tiempo, porque ya viene la Copa Oro. ¿Qué podemos esperar de la Selección en este torneo? 
Tendré solo una semana (de preparación) y solo con una serie de jugadores, y esto repercute. Es importante evolucionar, y ver qué nos permite este equipo. Para mí también es un poco incógnita, y soy el seleccionador. Yo creo que estamos en disposición de hacer frente a selecciones más potentes. No estamos aún para hacerle frente a Chile o España, pero sí para equipos como Canadá, Jamaica, o incluso una Costa Rica. Todos los fogueos que hemos tenido hasta ahora, y toda la competición, nos ayuda a pensar que este equipo está más posibilitado para hacer una buena Copa de Oro. 

¿Esta Copa Oro será un laboratorio para probar y corregir errores, más pensando en llegar bien a la eliminatoria en agosto-septiembre y no tanto en clasificar a semifinales, cosa jamás lograda?
Es así, pero no sabemos dónde nos vamos a quedar. A lo mejor no podemos ser campeones con las circunstancias y realidad de este equipo. Me gustaría equivocarme, pero debo ser sincero: tenemos pocas posibilidades. Hay menos posibilidades de ser campeón que de quedarnos en fase de grupos o en cuartos de final, donde este equipo ha llegado en toda su historia. Mentiría, y vendería humo, si dijera  que este equipo ya está para ser campeón. Para eso están los que tienen que estar: México y Estados Unidos. Esa es la realidad, pero no es tan negativa: estoy diciendo que nuestra realidad nos permite hacer una copa que nos servirá aún más para cuando llegue la tercera eliminatoria a la Copa del Mundo, a estar más preparados de como estábamos con St. Kitts y Nevis. 

Sobre St. Kitts y Nevis justamente, la afición aplica una lógica… Si esta isla de 50 mil habitantes nos metió en apuros… ¿Cómo hará la Selecta contra los rivales que vienen, que son más fuertes? Y eso en tan corto tiempo, porque la eliminatoria es ya en agosto-septiembre. 
Primero, diría que St. Kitts y Nevis era un lobo con piel de corderito. No es la isla de 50 mil habitantes, sino que muchas veces es de cómo nos organizamos. Esa isla tenía un staff técnico muy profesionalizado, con jugadores en Inglaterra y también muy profesionales, en ligas inferiores es cierto, pero con menos jugadores amateurs de lo que nos querían demostrar… los vimos en su casa que no eran una perita en dulce, y teníamos que estar a un nivel alto para eliminarlos. Afortunadamente, los jugadores se emplearon como se tenían que emplear, y creo que el resultado y el juego fue contundente para eliminar a ese rival. Pero no le menospreciemos, por favor. Es un equipo que empató con Haití y Canadá 0-0, que le ganó a Guyana Francesa, que a su vez le había ganado a Honduras. Y eso hace poco, no hace una eternidad. 

Pero, ¿cómo evolucionamos de lo visto ante los Sugar Boyz a lo que viene?
No estamos tan lejos. Si este equipo (St. Kitts) no era tan fácil, no estamos tan lejos de enfrentarnos también a Canadá y estar a nuestro nivel. También yo podría decir ‘ah, pero solo perdimos 1-0 con Chile’. A lo mejor no estamos tan lejos de Jamaica o de St. Kitts y Nevis, y estamos ahí, para lucharlo. Tenemos que jugar al máximo de nuestro potencial. Si lo hacemos, a lo mejor perdemos 2-0 contra EE.UU., y la gente se puede decepcionar. Pero habremos jugado al máximo. A lo mejor jugando a nuestro potencial máximo le podemos ganar a Canadá en la prórroga. U otro partido en cuartos de final. Hay que hacer el máximo de esfuerzo para llegar a lo que podamos. Ojalá sean cuartos o semifinales. 

Regresando a esa noche en el Cuscatlán contra St. Kitts y Nevis, ese 4-1 en el Cuscatlán; en el primer gol de Cerén, vimos a un Roca que explotó en el festejo. ¿Por qué tanta euforia?
Creo que soltamos los jugadores mucha presión. No hacía falta que nos pusieran una presión añadida. Es una selección joven que lo sintió en las carnes, ver el proceso que tienen los medios de comunicación, la gente es así. Al final, son ustedes generadores de opinión, y de su opinión mucha gente se vale para determinar si ese partido es más fácil o más difícil, o si tenemos que ganar holgadamente, si lo estamos haciendo mal o bien. Me gustaría que fuéramos más realistas con la situación. Hay que ser ambiciosos, pero tener los pies en el suelo. Vamos a la Copa Oro e intentaremos hacerlo bien. No hace falta una presión añadida. 

¿Usted percibió una presión añadida por parte de los medios?
Yo sí. No simplemente yo, sino los jugadores. Y se viene esa explosión de júbilo (en el 1-0 parcial en el Cuscatlán). Creo que hay que felicitar a los jugadores, por saber estar en esas situaciones. Aunque la gente decía ‘ah, no St. Kitts y Nevis’… sí, pero ellos nos habían puesto en aprietos en el partido de ida, uno no sabe cómo se lo van a poner en la vuelta. Uno tenía que dar el máximo de sí. Y sabía que ese gol tan rápido nos daba ese coraje para seguir con el partido con un poquito más de confianza. Y por eso ese júbilo y también para exteriorizar nuestra unión. Aquí hay una comunión entre jugadores y staff, que nos la hemos ganado con un trabajo serio y responsable. 

Sobre esa presión… ¿No era lógica, partiendo de que El Salvador era favorito?
Claro. Uno puede recibir algún tipo de críticas, que en el fútbol son normales. Pero unas son más severas y otras son más coherentes. La información faltaba, había medios que menospreciaron a St. Kitts y Nevis, y siguen menospreciándola después del partido. Nosotros fuimos los primeros en analizar a este equipo, y dijimos que nos podía dar más guerra de lo que la gente esperaba. Le dijimos a los medios la información y no la tomaron en cuenta, siguen pensando que son una isla de 50 mil habitantes y cuatro negritos que juegan en la playa y son taxistas. No es verdad. ¿Y qué somos nosotros, por otro lado?

¿A qué se refiere?
¿Qué somos? Un grupo que viene de un año de trabajar juntos, con una media de edad de 25 años. ¿En dónde jugamos? ¿Qué, la liga salvadoreña es muy fuerte? Estamos hablando de la peor liga en Centroamérica, según algunas versiones por debajo incluso de la nicaragüense. Con jugadores que juegan en Segunda División en la liga americana, con jugadores que no juegan en otros equipos en Europa, donde desgraciadamente juegan pocos minutos. Vamos a mirarnos nosotros primero el ombligo, y decir: ¿Qué es El Salvador? Y si lo tenemos claro, a lo mejor la presión (de los medios) es más consecuente, más lógica o se maneja diferente. Lo que no puede ser es que haya medios que quieran hacer ver que ‘somos El Salvador’, que ‘somos el equipo que estuvo en dos mundiales’… Por favor, estamos hablando de 35 años. Estoy hablando de un equipo nuevo. Tenemos que tener toda la confianza en estos chavales, les tenemos que pedir lo máximo. Pero no por encima de lo que la gente nos quiere hacer creer. 

Lo que ocurre, profesor, es que usted da sus razones, pero algunos no las ven como tales, sino como excusas. Sobre todo porque Ud. sabía a lo que venía cuando aceptó dirigir a El Salvador. 
Yo tengo una doble funcionalidad aquí. La función que tengo es intentar sacar un rendimiento de los jugadores, porque tengo un calendario, tengo que hacer una lista y sacarles el máximo rendimiento en pocos días. Pero también tengo que hacer esta labor, de decir: la formación es mala, lo de los famosos terrenos de juego… Eso no lo digo yo, es que lo dice todo el mundo. ¿Qué excusa estoy diciendo yo, que no sepa todo el mundo? ¿Que lo saben incluso las personas que dicen que estoy diciendo excusas, pero luego dicen ‘vaya campo de mierda había ese día’? ¿Pero si lo estás diciendo tú (periodista), entonces es excusa mía? Lo que yo estoy diciendo es que cuando mejor tengamos los campos, los niños podrán jugar, tendremos menos defiencias técnicas. Imagínate: Si los profesionales entrenan y juegan en campos horribles, ¡no me imagino cómo deben entrenar los niños en este país! Y nos creemos y decimos ‘no, es que el Mágico González salió de ahí’. ¡Pero qué nos importa! 

“Mágico” se sale de la regla… 
Realmente, pero una flor no hace verano. Tenemos que mejorar en muchas cosas si queremos estar a la altura de lo que se nos pide. Después me piden que tengo que jugar bien, pero resulta que los campos están hechos una mierda, que los jugadores y la competición (liga local) es una mierda, que no tengo jugadores de un gran nivel o en buenas posiciones. Y claro, son excusas. Pero luego llega el día del partido, y ahí ya no hay excusas. Me dicen ‘juegue bien, y toque’, y luego los periódicos se permiten decir ‘es que hubo pérdidas de balón’, ‘hubo situaciones donde el otro equipo’… señores, ¿entonces de qué estamos hablando? ¿Qué les pasa? Me hace mucha gracia. Pues bien: es normal, es un mundo de pasión. Creo realmente que estamos viendo demasiado al Barcelona y al Real Madrid. Vamos a dejarlos a un lado. Nosotros somos lo que somos, tenemos que ver nuestras posibilidades y manejarlo. Que los medios de comunicación sean lo más ambiciosos posibles, para intentar empujar… Pero creo que el ciudadano de la calle sabe perfectamente que es un proceso que nos va a costar, y que poco a poco lo iremos transformando en un equipo que, ojalá, la gente se empiece a sentir orgullosa. Tenemos la Copa Oro, que es el primer test. Vamos a por ello, sin miedo, pero sí sabiendo lo que somos. Y esa presión añadida que nos han querido meter muchos medios que se quede en su justa medida. Que el jugador salga convencido de sus posibilidades y sin el nervio, que al final te atenaza para fallar esos pases que decíamos. 

Ha habido partidos contra rivales de entidad como Argentina, España, Chile, etc. ¿Ahora sirve más un oponente más de la zona, un caribeño tal vez, pensando en la eliminatoria a Rusia 2018?
A mí siempre me gustaría encontrar a los rivales adecuados. Si estamos 85 en la clasificación FIFA, me gustaría encontrar rival del 50 al 70, rivales que realmente fueran, en teoría o en práctica, algo superiores a nosotros, porque esto te ayuda. Cuando juegas con un top 10, sea en seis o siete amistosos, que es lo que nos ha pasado, sabes que el resultado puede ser un condicionante para perder confianza. Esto te determina la forma de jugar. Sabes que no podemos tener la posesión de balón. Y la gente dice, ‘juguemos con dos o tres delanteros’. ¿Cómo vamos a hacer eso, si lo que tenemos que hacer es defendernos, porque ellos van a tener más la posesión? ¿Prefieres perder 7-1? Pues yo no. Yo voy a jugar y ganar el partido, pero dentro de las posibilidades. Me puedo equivocar. Con Chile fue 1-0, pero creamos dos o tres ocasiones que pudo ser el 1-1. A mí me piden ser competitivo. Y serlo es elegir el tipo de táctica o estrategia que puede ser mejor para tener un resultado. Para tener un proceso bueno, lo ideal sería una selección de 50 a 70 en el ránking, pero no un top 10 ni un 140. La gente lo tiene que entender así. Este proceso iría mucho mejor si desde el principio se hubiera hecho así. Pero es imposible, lo sabemos, hay temas económicos de por medio. Eso a nosotros no nos ha hecho crecer como deberíamos. Hay que decirlo así, lo digo claramente. Me hubiese gustado de otra forma. Pero no me gusta que España venga y me haga ocho goles. Porque tú y yo sabemos que, si pasa eso, en 10 días yo estoy fuera. Este proceso no habría servido para nada, porque el fútbol al final son resultados.