Ramón Sánchez: “Si nos organizamos, tarde o temprano, el fútbol salvadoreño va a dar el salto”

El DT de la Sub 23 analiza su primer mes al frente del equipo. Y habla de todo en esta entrevista: los directivos, los entrenadores nacionales y el talento de los jugadores.

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Ramón Sánchez piensa que van por buen camino. Foto EDH

Por Gustavo Flores | Twitter: @Gusflores21

2015-06-22 7:18:00

Ramón, ya cumple un mes al frente de la Sub-23. ¿Era el momento justo para hacerse cargo de una selección después de una ‘vida’ trabajando en el fútbol?

En la vida uno siempre espera una oportunidad, trabaja, se esmera, trata de sobreponerse a cualquier dificultad para poder obtener algo. Las cosas Dios las pone así, El sabe en que momento. El sabe el esfuerzo que uno hace en la vida, lo considero como un premio a la perserverancia, al esfuerzo. Estar al frente de una Selección nacional me hace sentir satisfecho de haber cumplido en mi ciclo de trabajo. Es un nuevo ambiente, una nueva oportunidad. Y así trabajo.

¿Cuáles son las principales diferencias con estar al frente de un equipo? 

No es lo mismo; aquí está en juego la opinión de todo un país, el reconocimiento de todo un periodismo. Eso hace que tenga mucho más responsabilidad. Es una motivación encontrarme con un grupo de jóvenes con buena intención. Todo me hace creer que los resultados se van a dar.

A veces el ‘largo plazo’ en las selecciones justamente no son tan ‘largo’. ¿Es consciente que cualquier resbalón puede significar un cambio y que los técnicos son el primer ‘fusible’?

Es un reto bastante grande. La diferencia en cuanto a dirigir a Juventud es totalmente diferente. Primero en las condiciones que se trabajan. En Opico se trabaja con muchas limitantes, pero siempre había gente visionaria como el presidente Romeo Barillas. Como todos, no quería perder. Cualquiera piensa que tuve una ventaja pero perder 6 partidos seguidos no lo aguanta cualquier dirigente. Pero ahí se habló claro que los resultados del trabajo iban a venir. No se terminó como hubiera querido (con una final) pero eso no empaña lo que se hizo desde hace 18 años. Y queda la base de jóvenes.

El hecho de cambiar de estatus de equipo a entrenador de selección es distinto. Pero nos permite, en la medida que la junta directiva confíe, que se me de la oportunidad de estar no solamente un torneo. No estoy para un torneo, no dependo de una clasificación o no al Preolímpico. Mentalmente no estoy pensando que dependo de esos resultados y eso no fue lo que pidió la Junta Directiva.

¿Por cuánto tiempo es el contrato?

Ya está todo arreglado, hay un tiempo decidido, alrededor de 3 años. Eso nos serviría para trabajar con tranquilidad. Yo confío mucho en la gente que dirige nuestro fútbol, aunque mucha gente diga que no. Reconocer lo que esta Junta pretende en los niveles inferiores. Muestra de ello es que también le están apostando a niveles más abajo de Sub-23, ya sea Sub-15 o Sub-17. Ellos piensan en el futuro. Llegó el momento donde se van a estar viendo los jóvenes sin estar viendo resultados. Ellos quieren cambiar la filosofía.

Lo complicado es cuando no se dan los resultados…

Si no fuera así se estaría retrocediendo a lo que es conocido por todos. Lo que ha pasado por años. Quiero agradecer porque han pensado en nosotros los salvadoreños. Y se sabe que en los últimos tiempos no se ha pensado mucho en nosotros como entrenadores (para dirigir la Selección). Y esto da satisfacción.

¿Por qué no se confía mucho en el entrenador salvadoreño? ¿Cuál es la explicación?

Se da así porque uno como entrenador no se da su lugar. Siempre hay detalles a los que nosotros nos prestamos, y detalles que nos han faltado como entrenadores. Pasa también por despreocuparnos de ponernos al día, de actualizarse. Hay mucho compañero entrenador que se conformó con haber sacado su título en cierta época y ahí se han quedado, a pesar de los esfuerzos que la misma asociación de entrenadores hace esfuerzos para traer gente especializada y transmitir conocimientos. Yo asistí a un curso nivel FIFA que lo programó la Federación y la sorpresa mía que sólo había dos entrenadores de Primera.

¿Sólo dos?

Eso muestra que hay poco interés. Y eso hace que nosotros perdamos la credibilidad. Todos esos detalles nos han afectados a nivel entrenadores nacionales. Pero también tengo que reconocer  por la historia que los entrenadores nacionales han tenido los mejores triunfos. Hay una muestra de que hay capacidad aunque últimamente no se ha dado la confianza en nosotros. Hoy somos dos los que estamos al frente en Selecciones (con Henríquez).

Y en cuánto a los jugadores ¿es cierto que hay ‘materia prima’ para ilusionarse?

Si, mucho. Siempre lo dije: en nuestro país tenemos talento. Lo que hace falta es confiar en ellos. Y es lo que estoy haciendo, darle la apertura para que puedan desenvolverse mejor.

¿Cómo es su relación con Roca?

Muy buena. El objetivo de estar trabajando con la misma empresa nos obliga a estar de la mano. La aspiración es que se consiga algo positivo por el  bien del fútbol, no importa la categoría.

…Y entonces, ¿Ya no habrá coordinador de selecciones juveniles como fue anunciado en algún momento?

Creo que por los costos ya no. Aunque cualquiera de lo que estamos podríamos colaborar en ese campo.

¿Tuvo alguna comunicación con el Tuco Alfaro, su antecesor en el cargo?

No, cuando yo llegué él ya no estaba. Pero quiero felicitar al profe Alfaro, me siento orgulloso porque es un entrenador nacional y me ha tocado continuar su trabajo. Ha dejado muy buena base, debo reconocer que él lo que el hizo fue muy bueno.

Más de 18 años trabajó en Juventud, ¿qué diagnóstico se puede hacer hoy del fútbol salvadoreño?

Las comparaciones son odiosas pero tenemos que reconocer que el nivel que nosotros ahorita tenemos, a lo mejor nos hemos quedado cortos. A nivel Centroamérica es donde nosotros debemos dar el primer paso. No puede ser que Costa Rica, Panamá, Honduras y Guatemala a nosotros nos ganen casi siempre. Y que estemos contentos porque le ganamos a Nicaragua o Belice. No veo por qué debemos sentirnos alegres. Yo me sentiría alegre de ganarle a Panamá y ser rivales de más peso de Costa Rica. Ellos son los que ahora están arriba de nosotros. Nos hemos estancado. Y quiero señalar el caso de Belice o Nicaragua y ahora nos cuesta ganarle. Ellos han dado pasos pequeños pero hacia adelante.  Nosotros pareciera que nos detuvimos. Ojalá que nos hayamos detenido para agarrar impulso. Siento que vamos por ahí. 
Yo voy a seguir creyendo que tenemos nivel para poder competir. Tenemos el material humano. Hoy que estoy con los muchachos me doy cuenta el talento que hay. Si nos organizamos, tarde o temprano, el fútbol salvadoreño va a dar el salto. En la medida que se siga trabajando como se está intentando ahora.

¿Qué evaluación hace de su primer mes en el cargo?

Me imaginaba que el cambio iba a traer buenos frutos. Me encuentro con un grupo de jugadores con expectativas. Cuando le preguntaron a los muchachos su impresión sobre mi llegada, la respuesta de ellos fue tan positiva… Sintieron que se iba a experimentar una etapa diferente bajo mi mando. Y en la respuesta que vi, dedicación, en la energía que en cada entreno transmiten. Ellos quieren dar el paso. Mis ideas van a ser escuchadas y van a ser llevadas a la práctica. El problema es cuando uno habla y se ve que no interesa. Pero en esto, ellos son muy receptivos.

Quieren cambiar la historia…

Hemos hablado de la historia. En el 68 fue cuando El Salvador tuvo presencia en Juegos Olímpicos. Ellos están con la gran oportunidad de traer esa historia a la realidad de hoy . Y se los digo: ‘Esto representa algo importante y ustedes son los protagonistas. ¿ Y qué dicen? ¿Asumen su responsabilidad? ¿Creen que tenemos potencial?’ Si profesor’, responden. Se les ve. Estamos claro que nuestro objetivo es pasar la primera fase. Muchos me comentaron que han visto trabajar a este grupo de muchachos como que han nacido de nuevo en su parte mental, están descubriendo que ellos tienen el potencial y la oportunidad que se puede dar el salto. Alex Hernández es un ejemplo de como luchar ante las adversidades…

¿Y el trato de la gente en la calle es distinto hoy al de hace un mes?

Si me tocar hablar de porcentaje son más las personas que me hacen buenos comentarios. Y todo lo que quedó sembrado en Opico. Ha crecido el apoyo de la gente.