El presidente de la FIFA, Joseph Blatter, no viajará a Canadá para asistir a la final del Mundial femenino el 5 de julio por razones personales, dijo el martes un abogado del máximo dirigente del ente rector del fútbol mundial.
Altos ejecutivos de la organización, con sede en Zúrich, fueron acusados de corrupción el 27 de mayo por fiscales de Estados Unidos, que les acusan de supuestos sobornos por valor de 150 millones de dólares en la adjudicación de importantes torneos futbolísticos desde hace 24 años.
Blatter recibió presiones para renunciar y el 2 de junio anunció que dimitiría. Los fiscales estadounidenses no le acusaron de ninguna ilegalidad, pero su gestión en la FIFA está bajo escrutinio, según fuentes familiarizadas con las investigaciones en Estados Unidos y Suiza.
“No va a ir a la final en Canadá”, afirmó el abogado, Richard Cullen. “Ya informó de esto a los organizadores y se refirió a razones personales”.
Cullen dijo que el primer vicepresidente de la FIFA, el camerunés Issa Hayatou, presidirá en su lugar la ceremonia de entrega de trofeos tras la final en Vancouver.
Esta será la primera vez, desde que se convirtió en presidente de la FIFA en 1998, que Blatter no entrega el trofeo a las ganadoras de la competición femenina, que se celebra cada cuatro años.
Blatter, el autodenominado “padrino del fútbol femenino”, afirmó antes del comienzo del torneo el 6 de junio que esperaba poder ir a Canadá.
Las semifinales del campeonato enfrentarán el martes a Estados Unidos contra Alemania y a Inglaterra con Japón un día después.
Las investigaciones de las autoridades estadounidenses y suizas incluyen también la pesquisa acerca de cómo adjudicó la FIFA los derechos para celebrar los Mundiales de 2018 y 2022 a Rusia y Qatar, respectivamente.