Pablo dijo que siempre es un orgullo poder representar al país y admitió que el partido ante Argentina es uno de esos que todo el mundo quiere jugar, pero que solo unos pocos tienen el privilegio de hacerlo.
Punyed dijo que no siente nervios de enfrentarse a Lionel Messi, Gonzalo Higuaín y Javier Mascherano, sino emoción e ilusión. El volante cree que es posible obtener un buen resultado Argentina y dijo que la selección tiene un muy buen plan de juego. El equipo se ha concentrado en las debilidades de Argentina: no defienden tan bien como atacan.
El concepto futbolístico en el que más ha insistido el catalán Albert Roca es la organización, ya sea en defensa o en ataque. El cuerpo técnico ha resaltado a los jugadores que la clave del partido será que se mantengan organizados, solidarios en defensa y que en ningún momento rompan las líneas.
Punyed admitió que aún no tienen claro si jugaran con uno o dos puntas en ataque, pero cree que lo más probable es que sea con uno, Rafa Burgos es el candidato principal a empezar de titular. Otro punto clave en el que se ha enfocado Roca es en hacer daño a Argentina por las bandas y también han practicado algunas jugadas de contragolpes rápidos.
El volante del Stjarnan dijo que obviamente un buen resultado contra Argentina los motivaría en el partido contra Guatemala en Los Ángeles. Pablo sabe muy bien que el partido contra la selección guatemalteca es un clásico centroamericano y cree que vale más que el partido contra Argentina para el pueblo y la selección lo tratará como una eliminatoria.
Punyed, quien ha vivido desde hace mucho tiempo fuera del país, sigue sorprendido de la entrega de la afición salvadoreña a su selección sin importar dónde juegan. A Pablo le alegra y motiva que los aficionados sean tan amables y reciban tan bien al equipo.
Con respecto a su situación en Islandia, Pablo admite que el Stjarnan le ha ofrecido renovar el contrato (el cual termina a final de año) pero aún no ha firmado anda, sigue barajando opciones. Punyed es feliz en Islandia, la liga está creciendo mucho y se siente adaptado a la cultura y la comida (aunque admite que le hace falta la carne porque ahí se come mucho más pescado), pero no descarta nuevos retos.
Ante la pregunta de si extraña El Salvador, Punyed admite que sí y que lo que más añora es la Costa del Sol.