Para estos días de vacaciones es común ver autos varados a orilla de carreteras en ruta a la playa o saliendo de las mismas y echando humo. La causa: el sobrecalentamiento del motor.
Una de las cosas que generan ese problema, podrá creerse que son las trabazones cerca de los centros de entretenimiento, playas o centros acuáticos, o el conducir lento
En realidad todo tiene que ver con el adecuado mantenimiento que le damos a nuestro vehículo.
Lo mejor es que cada semana pudiera verificar si el radiador está gastando líquido (agua o refrigerante). Si está consumiendo demasiado lo mejor es hacer un sondeo o revisión completa.
Qué aplicar? agua o refrigerante
Cuando el líquido del sistema de refrigeración es agua, a la larga tendrás un grave problema que podría terminar en un sobrecalentamiento del motor.
Según la química, entendemos que el agua no se lleva bien con los metales y la corrosión u oxidación en el interior del radiador y las cañerías, así que a la larga será inevitable. No solo eso, el problema se puede extender a las mangueras y cámaras de agua. Con estas piezas debilitadas, un riesgo de fuga será inminente.
El refrigerante, en cambio, posee componentes químicos que ayudan a proteger el motor y no oxida los interiores.
Además, su fórmula evita que se evapore al llegar a los 100 grados C. Pero por supuesto se debe estar atento a que no haya fugas en mangueras o en las rejillas del radiador o contornos del mismo. A disfrutar!