Parecía que se iba el Premundial y no iba a ver salvadoreños en el estadio alentando… Pero no contábamos con José Álvarez, un salvadoreño oriundo de San Jacinto que ahora vive en San Francisco.
Tal fue la euforia de la victoria 3-2 sobre la hora ante Canadá que le dijo a su hijo Marcos, “nos vamos a Jamaica”.
Y así fue, ayudado a que trabaja en el aeropuerto de San Francisco y consigue los boletos más baratos, se tomó un avión a Montego Bay no sin antes cruzarse todo Estados Unidos para la conexión en Nueva York.
“Mañana nos regresamos, solo vinimos a ver el juego de México, nuestro gran rival. Una lástima perder así…”, confesó José.