BRASIL.- La violencia en el fútbol es un tema complicado. Por este motivo, el Sport Club do Recife de Brasil tuvo una original idea para combatir esta problemática y contrató a las madres de los barras.
Para esto, se hizo una capacitación formal para mantener el orden en los partidos y tener la autoridad y seguridad para controlar a cualquier asistente que cause problemas, incluidos sus respectivos hijos. Las madres fueron ubicadas de forma estratégica dentro del Arena Pernambuco plenamente identificadas con chalecos naranjas con la frase “madres de seguridad” en sus dorsos.
El nuevo sistema de seguridad se estrenó el pasado 8 de febrero durante el derbi entre el Sport Club do Recife y el Náutico (el tercero más antiguo del fútbol local), que terminó 1 a 0 y en el que no se registraron incidentes o altercados, ni tampoco detenidos.
“Es un tipo de acción que tomó a todos por sorpresa. Nadie podía imaginar que se iban a encontrar con sumadre en un partido de fútbol. Y lo más interesante era saber que estaba allí trabajando por la paz en el estadio”, expresó el ejecutivo de mercadeo del Sport, Sid Vasconcelos, en la página web del club.