Tenemos un fútbol que necesita con urgencia de señales positivas. Urge de credibilidad y exposición, para que las marcas y patrocinadores inviertan más. Urge de publicidad y presencia en medios, para que los aficionados (que ya son una especie en extinción) sigan visitando los estadios. Urge de difusión, para que los jugadores talentosos entren en la mira de cazatalentos o entrenadores o equipos que luego les abrirán puertas, hacia un futuro mejor. Es un fútbol que agoniza, regido por una dirigencia que ha tomado una decisión a espaldas de todo lo antes apuntado. En lugar de hacer de los medios sus aliados, ha decidido ponerles una cuota obligada, para hacerlos “patrocinadores” a la fuerza.
Es un caso insólito que ya causó eco en Chile, México, Argentina, España… en todos lados levantan las cejas y catalogan lo de los 75+IVA por carnet como un absurdo. Señores, es una medida que va a contramano de lo que ocurre en ligas profesionales que deberían ser un espejo para ustedes, un rumbo, un ideal de cómo hacer las cosas.
Veamos un caso concreto, para romper lógicas equivocadas. ¿El diario deportivo Marca se beneficia del Real Madrid, Barcelona y Liga Española en general? Claro que sí. Ni dudarlo. Miles de ejemplares vendidos con la presencia de los Cristiano, Messi, Casillas y demás en sus portadas.
Ante esa realidad de negocio informativo, ¿le cobra la Liga Española, el Barça o el Madrid a Marca, o a cualquier otro medio, por cada credencial de sus periodistas? ¡Por supuesto que no! ¿Por qué no lo hace? Porque sabe, entiende y aprecia que la difusión que da este periódico, y los medios en general, a sus equipos, es mucho más valiosa. Es oro puro. Es algo no medible, ni siquiera cuantificable: es la construcción de esa credibilidad, publicidad y difusión que tanto necesitan… porque… volvemos al inicio… Tenemos un fútbol que necesita con urgencia señales positivas.
Continuar esta medida seguirá alejando a la Primera División de todas las páginas deportivas del país, provocará menos espacio en TV y sitios web, etc. De mantenerse ese panorama, señores, los grandes perdedores no serán los medios. Será el fútbol. Su producto.