El sonsonateco Marcelo Arévalo ya está en semifinales de la Copa Maya, un torneo Future que se disputa en el país en el Maya Country Club, en La Libertad.
En una hora y 15 minutos, el nacional no le dio oportunidades al argentino Matías Descotte, de 20 años y 894 del mundo, a quien dominó por completo durante el partido.
Pese a que el tiempo empeoró en relación a las jornadas previas, ya que hubo mucho viento que no era constante y sorprendía, Marcelo tuvo muy buen dominio de las acciones, gran acierto en el servicio, y cometió pocos errores no forzados. Nunca estuvo en riesto su saque, nunca pudo encontrar Matías la fórmula para responderle a ese potente disparo con el que pone en juego la bola.
Después de estar parejos hasta el 2-2 en el primer set, el salvadoreño le quebró el servicio a su rival en el quinto game para ponerse arriba 3-2, y luego confirmó al ganar con su saque. Llegaron al 5-3 y el argentino servía cuando volvió a sufrir un nuevo quiebre, con lo que el nacional se llevó la primera manga por 6-3.
Para la segunda, Matías intentó variar con su servcio, mover a Arévalo, pero realmente no encontró cómo. Y, para colmo, jamás pudo contra el servicio del nacional.
Después del 2-1, Arévalo quebró y ganó el resto de games para terminar el partido de manera rápida y clara y clasificarse a semifinales, a donde se enfrentará con el ecuatoriano Iván Endara, 611 del mundo y de 26 años. Con él ha jugado dos veces ya, una en el 2012, en el Panamá Future, duelo que ganó por 6-7 (5), 6-0, 6-2, y la más reciente en 2014, cuando perdió en el Pereira Challenger, en Colombia, por doble 6-4. El juego será este viernes, a partir de la 1 de la tarde.
La noche del miércoles, junto con el venezolano Luis Martínez, vencieron al azteca Jeff Guerrero y al nacional Alexander Rushin con parciales de 6-3, 6-1 para clasificarse a semifinales, instancia en la que a eso de las 6 p.m. estará enfrentándose contra la dupla Christopher Díaz (GUA)/Iván Endara (ECU) por el boleto a la final.
“Me he ido sintiendo mejor partido a partido… ahora me sentí mucho más suelto, la derecha estuvo mucho mejor, el saque también con mucho más porcentaje (de acierto), más seguro. Creo que tal vez un game creo que estuve 40-30, de ahí la mayoría los gané en 0 y en 15, y eso me dio mucha confianza, el saber que a mi rival le estaba costando retornar mi servicio, y fue que tomé más confianza para estar más agresivo y quebrarle el saque”, valoró el cuscatleco.