La deuda eterna

Otra vez los equipos de Primera incumplen sus contratos con los jugadores

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Por Gustavo Flores/ Twitter: @Gusflores21

2014-12-04 9:59:00

En el fútbol salvadoreño sobran las malas noticias.  Y hasta parecen reciclarse. Los datos están ahí, para sorprenderse y también para analizarlos, para sacar conclusiones buscando algún foco de luz que aporte una idea parecida a una solución. Por un lado, las raquíticas taquillas que fin de semana tras fin de semana dejan los partidos de Primera División. Con datos para el asombro y el espanto: 8 partidos con menos de 200 personas con boleto pago durante la fase regular. Por el otro, y con esa excusa, la liviandad con la que los directivos tratan el tema de los salarios a sus empleados, en este caso los jugadores.

Entre los dirigentes, la excusa preferida, se dijo, es la falta de público. Si están en el fútbol, deberán ser más ingeniosos para atraer a la gente. Y suelen recurrir a dos disparates: apostar a que una taquilla salvadora pueda pagar el presupuesto (cuando no se llega a semis, esta se esfuma…) Y el segundo punto: bajar el salario de los jugadores cuando no se dan los resultados esperados. Tampoco se permitiría semejante atropello en ninguna liga organizada.

Según una investigación de los periodistas Víctor Zelada Uceda y Claudio Martínez, solo dos de los 8 equipos de Primera División están al día con sus salarios: Metapán y Juventud Independiente. El 80 por ciento de los equipos de una Primera División con deudas sería un escándalo en cualquier liga del mundo. Aquí pasó casi desapercibido y hasta se ve como  algo “normal”. Mucho tienen que ver los jugadores, que no se organizan, que no luchan en conjunto para ponerle un freno a semejante desorden, por llamarlo con delicadeza. Y lejos de formar un sindicato que defienda sus derechos, pasan los años y siguen repitiéndose las  mismas injusticias, los mismos atropellos. Ahí está Chamba Mariona, una gloria del fútbol salvadoreño intentando una y otra vez organizar a los jugadores y darles un sustento legal para evitar abusos. Está demasiado solo. Nadie les llegaba a las reuniones que solían proponerse. Los jugadores no se dan cuenta que un día son otros, pero que mañana pueden ser ellos mismos…