Sembrado dos del evento, solo el dominicano Víctor Estrella tenía mejor ránking que él en el individual del tenis. Pero en la cancha no juega el ránking.
Ya se habían ganado mutuamente con el azteca Daniel Garza, más dado al juego de toque, de hacer correr a su rival, que del peloteo fuerte, profundo que maneja Arévalo.
El plan cambió rotundamente para el partido por el clima. El nuevo frente frío llevó vientos al club Las Palmas, lo que, según Arévalo, le afectó para desarrollar su juego.
“El clima es para ambos, pero mi juego es más en el saque directo y en golpes fuertes, pero con el viento tuve que cambiarlo, cuidar más la pelota”, afirmó el tenista.
El juego
El partido fue parejo de principio a fin, tenso, con discusiones entre los jugadores y de parte de estos con el arbitraje, y se definió en dos sets en el desempate, por 7-6 (4), 7-6 (4) para el local.
En el primer set, ninguno pudo hacer daño y sacarse ventaja. Se fueron al desempate, a donde Marcelo erró unas bolas que le dieron la ventaja al mexicano.
Con el set arriba, Garza salió envalentonado en el segundo, y encontró a Arévalo un poco desconcertado, impreciso.
Le quebró y se fue arriba en el marcador, pero rápidamente le devolvió el favor el salvadoreño para ponerse 2-2. De ahí en adelante, ambos tuvieron opciones de quiebre.
Cuatro levantó el nacional en el octavo game, uno el azteca en el siguiente.
Después, reclamos de uno, de otro. El mexicano pedía sanción antideportiva para Arévalo cuando lanzó una bola afuera de la cancha por protesta. Previamente el azteca había hecho lo mismo. Tuvo que llegar incluso el jefe de los árbitros, y terminó con sanción salomónica para ambos.
El partido siguió, con más tensión, y faltaba cabeza para calmar la ansiedad en ambos. Marcelo, con 5-4 arriba y sacando el mexicano, presionó para cerrar el set, pero no pudo.
De nuevo, llegaron al mano a mano, al desempate. Y ahí, empezó ganando el nacional tras conseguir su punto y hacer un “miniquiebre” al rival.
Pero el azteca tuvo temple para aguantar la presión e igualar las cosas. Después, llegó una doble falta de Arévalo, y un punto discutido en el que el juez de línea dio fuera y el de silla se lo dio al mexicano.
Marcelo se puso a discutir con el árbitro, con un set abajo y a un punto de perder el partido. No hubo marcha atrás, el réferi no iba a cambiar su decisión, y el azteca culminó con la victoria.
“El objetivo no se logró, era llegar hasta el final, pelear por la medalla. Un poco triste por el resultado”, mencionó Arévalo.
Para el jugador, “las condiciones se presentaron de una manera que no imaginé, eran para los dos pero podía haber sacado más ventaja en condiciones normales si no hubiera sido con este viento, soy agresivo y más preciso en los golpes, pero cuando quería acelerar la pelota para hacerle daño al rival, no cogía la dirección, se salía. Muchos errores, mucho juego corto, pelotas que parecía que iban para afuera, entraban. Fue un juego un poco más de maña. A pesar de todo, se resolvió hasta en lo último, en dos desempates”, concluyó.
Con este resultado, es poco probable que El Salvador tenga opciones de disputar de nuevo medalla de oro en las competiciones que quedan.
Estas son boliche, gimnasia, ecuestres, luchas, atletismo, karate, vela y squash. De estos, vela está peleando bronce o plata con Enrique Arathoon. Hay posibilidades en karate, a donde se espera que logren subir al podio, pero será complicado, y similar es la situación con luchas.