Positivitez. Esa palabra que -todavía- no reconoce la Real Academia Española, pero que en El Salvador hoy, y para siempre, patentó el gran Mágico González. “Positivitez” es justamente lo que dejó el primer amistoso de la Selecta en NJ pese al duro 0-3 que reflejó el marcador final.
El rival era de los más “pesados” rivales que podía asomar en el horizonte. Una Colombia que viene de hacer un excelente Brasil 2014, con figuras en el top internacional y el inicio de un nuevo ciclo de Pekerman con caras nuevas que buscan su lugar. Hoy, un grande del fútbol mundial. El Salvador no se vio mal ante semejante rival. Si es verdad que estos amistosos son para analizar funcionamientos y no resultados, lejos de ser un equipo “escuálido” y “de tercera” (tal como fue tildado por periodistas colombianos), le jugó de igual a igual a los cafeteros y en el primer tiempo hasta le manejó el partido. Hasta lo reconoció el propio Falcao…
Con muchas cosas por mejorar, con la concentración y coordinación defensiva y la definición como prioridades, hay aspectos netamente positivos que dejó la Azul.
Henry puso en evidencia que es un portero de jerarquía;Larín y el Ruso se acoplan cada día a la idea de carrileros con recorrido. Punyed tuvo un debut correcto en un puesto en el que no es habitual (es ‘10’ y jugó de contención) y Arturo Álvarez es la referencia futbolística de hoy en cuanto a manejo, criterio y buen pie. No estuvo Darwin, pieza clave.
En cuanto al juego de equipo, hay una orden estricta yse cumple a rajatabla la “idea Roca”:salir jugando. Siempre. Es cierto, por momentos Arturo está muy solo en el armado, falta “punch” arriba y Rafa Burgos parece no pasar por su mejor momento. No hay gol. Habrá que seguir buscándolo. Hoy, a la espera de ver el segundo juego contra Ecuador, hay sensaciones positivas. O simplemente “positivitez”, como dice el más grande.