Metapán sonríe tranquilo, mientras Águila saborea amargura. Al minuto 94, Nicolás Muñoz salvó el punto para los caleros, que se veían perdidos ante un Águila, que se supo aplicar en el estadio Calero, pero que en los minutos finales, se le escapó la victoria. Con este resultado, los metapanecos siguen lideres, los migueleños son segundos, aunque con un partido menos.
Un encuentro que tuvo muy buena dinámica, pero si nos basáramos en el número de aficionados que estuvieron en las gradas del estadio “Calero” Suárez, parecía un partido más. Como si los dos equipos estuvieran en la zona media de la tabla. Pero eso es el reflejo de este fútbol, al que la hinchada solo parecen responder en semifinales y finales.
El ambiente era perfecto, cielo despejado y sin amenazas de lluvia. Las barras, la de esos aficionados fieles, intentaron imprimir más ritmo a un partido que tuvo dinámica desde el primer minuto, con la explosividad ofensiva que tuvo Águila, con el que inició dominando.
Fueron casi 25 minutos de intensa presión desarrollada por los metapanecos, donde de una forma indirecta también se probó la concentración del portero Henry Hernández, quien pareció no estar repuesto del todo de la falla que cometió con la Selección, debido a que en una de las tantas centralizaciones de los migueleños, prefirió puñetear, en lugar de agarrar de manos.
También, cuando se complicó en un balón atrasado que le pasó Francisco Álvarez y que Hernández dominó y estuvo a punto de perder ante la presión de Sean Fraser y Arcenio Rodríguez, por lo que con mucho apuro logró mandar a un costado.
La mejor oportunidad que tuvieron los caleros, que a la larga fue la más clara que que les presentó en todo el partido, a los 38’, fue cuando Hector Ramos fue asistido por Álvarez, adentro del área, quedando frente al portero Benji Villalobos, quien con el cuerpo rechazó la pelota y mando a tiro de esquina.
Pero Águila no iba a perdonar, cuando el brasileño Ronaille Calheira fue derribado en el área, por Vladimir Hernández, por lo que se sancionó un penal.
El mismo atacante de los emplumados se hizo justicia, al cobrar el disparo dos veces, puesto que tuvo que repetirlo por invasión al terreno, por sus mismos compañeros. La idea no la cambió, un tiro raso, con cierta potencia, pegado al ángulo inferior derecho de Henry Hernández, quien no pudo llegar al disparo.
El problema de Metapán se basaba en la posesión, por lo que para el inicio del segundo tiempo, el técnico Jorge Rodríguez envió a Odir Flores, por Diego Peraza, para que se recuperara la idea con el balón, mientras que en el otro sector, el DT Messina solo decía “dale, dale, dale…”, exigiendo la presión sobre el rival.
La mejoría de los caleros se notó desde los primeros instantes, con una mejor conexión entre el medio campo y el ataque, que tuvieron más participación con el juego sin balón, para desmarcarse o abrir espacios.
Los caleros buscaban salvar el partido, mientras los emplumados se resguardaban atrás, hasta el punto que los delanteros se convirtieron en defensores.
Pero un error en defensa, en la última jugada del partido, al derribar en el área a Nicolas Muñoz, significó en un penal que el “Yuyu” convirtió raso a la izquierda de Villalobos, que adivinó, pero no llegó, para evitar esta paridad, que les da un punto.