Rafael Arévalo es un deportista múltiple. El tenista, todavía miembro activo del equipo de Copa Davis y ocasional piloto de carreras en El Jabalí, hizo su debut en el padel, un deporte con ciertas similitudes con el tenis y con el que no tuvo problemas de adaptación.
En su primera aventura, acompañado por el español Javier Meana, ganó el torneo de la Hispanidad disputado en el Centro Español. Vencieron en la final al argentino Fernando Lapiduz y al español Ignacio Nicolau.
En total participaron 11 parejas, conformadas por salvadoreños y miembros de la comunidad internacional. El padel –nacido en México pero de gran popularidad en España- es un deporte que viene sumando adeptos y que se encuentra en camino a crear su propia federación. “Las bases de los estatutos ya están en poder del INDES y la idea es que en breve haya una cancha profesional que se construirá en Tuscania”, explicó Arévalo.
Rafa, raqueta número dos del tenis nacional, habla maravillas del padel: “Estoy contento porque hay un gran entusiasmo. Es similar al tenis, diría que es una mezcla de tenis con squash, porque se usan mucho las paredes. Pero sobre todo es muy divertido y muy fácil de jugar, ya que no se requiere de una gran técnica como el tenis”.
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