Sapos y dignos

"Los bichos cul..." que no querían arreglar partidos, son la nueva esperanza Azul. A apoyarlos

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La Selecta viaja este martes a Washington para preparar los amistosos contra Argentina y Guatemala. Foto EDH

Por Gustavo Flores | Twitter: @Gusflores21

2014-08-31 9:04:00

‘Mirá bien a quienes le van a decir porque hay un vergo de bichos culer…  allí, no vayan a sapiar’ denunció Fiscalía que se decían los amañadores para evidenciar a los nuevos jugadores convocados a la Selección que no querían arreglar sobornos para perder partidos. Ellos, los que no “sapiaban” (aclaración necesaria: sapo = soplón, en la curiosa jerga de los amañadores), son la esperanza de esta nueva Azul, que el miércoles inicia el camino, por enésima vez, de una nueva ilusión. 

Ellos, los que “sapiaban”, son la nueva generación de futbolistas que heredaron un pulpo corrupto que extendió sus tentáculos en el mar de la impunidad. Y ellos, ‘los sapos’, se negaron a ser cómplices de tal falacia. Fiscalía se tomó su tiempo para investigar, filtró algunos datos y dio una conferencia con lujo de detalles. Se les pasó un “detalle” no menor: lo hizo el día en el que la Selecta volvía a jugar en el Cuscatlán y ante su gente después de 22 meses. Y los nuevos azules no tuvieron su merecido apoyo. El combo de la conferencia, los precios y el clima fue letal para ver un deprimente estadio en la bienvenida de la nueva Azul. No lo merecían.

Muchos de los ‘sapos’ estarán sudando la camiseta en Estados Unidos con caras nuevas y fiables. La ilusión es también ver a una hinchada que los acompañe. No hay nada más leal y sincero que el hincha de fútbol. Y por ende no hay nada comparable a sentirse engañado en este coctel de juego, deporte y negocio en el  que se ha transformado el fútbol en los virulentos tiempos modernos. 

Posdata: Que vivan los “sapos”. Y que sean cada vez más.