SAN SALVADOR. “Las estadísticas están para romperlas”, aseguró Albert Roca, en la entrevista que EDHle realizó previo al viaje a esta Copa Centroamericana. En esa ocasión se refería sobre los 12 años que han pasado y seguirán siendo más, de no vencer a Guatemala, en partidos oficiales.
Pero también estaba otro reto, frente a Honduras, con quien tenía una paternidad sobre los cuscatlecos, los cual se sacudió un poco, con la victoria (0-1), en el segundo partido de la fase de grupo.
La frase de Roca tomó envión y ahora es recordada, para el partido contra Panamá, con quien ya se suman cinco partidos sin poder ganar.
El último triunfo de la Selecta sobre la “Roja”, sucedió el 22 de junio del 2008, en el partido de vuelta de la fase previa de la Eliminatoria mundialista hacia Sudáfrica 2010, 3-1, en el Cuscatlán.
Ese partido, es recordado por el gol sobre la hora de Luis Anaya, con un disparo desde fuera del área que pegó en el cuello de José Martínez, descontrolando a Jaime Penedo y que terminó definiendo la clasificación para los salvadoreños, a la segunda etapa de esa eliminatoria.
A partir de ahí, cinco partidos se han disputado, cuatro oficiales (tres de Copa Uncaf y uno de Copa Oro) y un amistoso, los cuales han sido definidos con dos triunfos para los canaleros y tres empates.
Un reto que se agrega al objetivo de querer ganar a Panamá, para conseguir el tercer puesto de esta Copa 2014.
Con leve ventaja
Aunque para muchos la historia es cosa del pasado, lo cierto es que también tiene su valor y un peso, que indica la evolución que ha logrado el fútbol panameño y que ha llegado a sobre pasar al cuscatleco en los últimos años.
Una serie que se originó en 1938, con un amistoso el 23 de febrero de ese año, que se disputó en la capital panameña y la cual terminó con triunfo cuscatleco (2-1).
Hasta el momento, son 40 partidos los que se han jugado, entre amistosos (19), de eliminatoria mundialista (10), torneos continentales -Copa Oro- (2) y los de Copa Uncaf (9).
La serie histórica es dominada por los salvadoreños, con 16 victorias, sobre 14 de los panameños. Diez veces han empatado, siendo dos de carácter definitorio por lo que se recurrió a la tanda de penales, finalizando en triunfos rojos.
Mientras que con los goles, 58 han sido anotados por El Salvador y 52 por Panamá.
Ventajas que se pueden tomar como un consuelo dentro de toda esta historia, que escribirá un nuevo capítulo con la definición por el tercer puesto de la Copa Centroamericana.
Crecimiento canalero
En Copa centroamericana, de las nueve ocasiones que El Salvador y Panamá se han enfrentado, los salvadoreños dominan con tres victorias, sobre dos de los panameños. Registran cuatro empates.
El último triunfo de los cuscatlecos se traslada al 2003, en las mismas tierras canaleras, donde se le superó (2-1) a Panamá, con la anotaciones de Nahum Galdámez y Rudis Corrales.
A partir de ahí todo se ha inclinado a favor de Panamá, incluyendo la única definición directa por el bronce, que se registra entre salvadoreños y panameños.
Ese partido sucedió en el 2011, también en tierras panameñas, durante la onceava edición de este torneo.
Cero a cero había terminado ese partido, del cual se tuvo que recurrir desde los doce pasos, siendo más efectivo Panamá, al convertir todos los disparos, frente a los salvadoreños que perdieron uno, en los pies de Arturo Álvarez.
Datos que se vuelven fríos para las aspiraciones cuscatlecas. Mismos que se tendrán que revertir si se quiere soñar en grande frente a una Panamá, que nos tiene la medida en los últimos tiempos.