Sobre su adaptación en Alianza y su cuota de goles con el equipo paquidermos, Toscanini comentó: “Si no se daban los goles, en cualquier momento iban a llegar”.
Siempre, en cuanto a romper las redes, el uruguayo también manifestó: “Para el delantero el gol te da tranquilidad para que tengas confianza. Y si no se puede no puedes dramatizar. Cuando tenemos los viajes lejos, cenamos como grupo”.
Toscanini es consciente del compromiso con el albo, el cual admite que no es fácil: “La afición de Alianza olvida lo que pasó el miércoles, tiene poca memoria el hincha y querrá que vuelva a anotar y ganar. Soy de la generación de Cavenaghi, Luis Suárez. En 2005-2006 llegó a Uruguay la base de lo que hoy es su selección. Por eso se le llama proceso”, concluyó.