El galés Aaron Ramsey, delantero del Arsenal, a parte de sus goles es reconocido por una especia de “maldición”. Cada vez que hace un gol alguna personalidad reconocida muere a las pocas horas.
El domingo marcó en la victoria de los Gunners sobre el Manchester City por la Community Shield, ayer el mundo se sorprendió del fallecimiento del actor Robin Williams.
Es que el listado casi suma una decena de fallecimientos, relacionados con poca diferencia de horas a los goles convertidos por el volante.
El 1° de mayo de 2011 le marcó al Manchester United. Al día siguiente, Barack bama informó el fallecimiento, en manos de efectivos norteamericanos, del islámico, Osama Bin Laden.
En octubre del mismo año, Ramsey volvió a anotar y esta vez ante el Tottenham. Tres días después, el creador de Apple, Steve Jobs, murió a los 56 años de edad después de una enfermedad larga.
Pocas semanas después, el 19 de octubre de 2011, marcó ante el Olympique de Marsella por la Champions League. Al día siguiente, falleció el dictador libio Muamar Muhamad Abu-minyar Kadhafi.
El 2012, en febrero, Ramsey hizo un gol ante el Sunderland y a las pocas horas se supo el deceso de la cantante Whitney Houston.
Dos meses después, en marzo, el volante metió un gol por su selección de Gales que derrotó a Escocia. Ese día murió el pianista cubano Bebo Valdés.
Ya en 2013, en mayo, el volante del Arsenal le marcó en el 4-1 a Wigan y que decretó el descenso del equipo. Al día siguiente falleció el cantante español Manolo Galván y dos días más tarde, el dictador argentino Rafael Videla.
Para septiembre, Ramsey hizo un gol frente al Olympique de Marsella y que los gunners terminaron ganando. Luego se supo de la muerte del boxeador Ken Norton, quien pudo vencer a Muhammad Ali.