Contrario a lo que se esperaba, una vez más la palabra Deporte estuvo ausente en el discurso de toma de posesión del Presidente Salvador Sánchez Cerén, lo cual, ojalá no vaya a ser un mal presagio, tal y como sucediera con el gobierno anterior, en el cual este rubro de la vida nacional no figuró en el orden de prioridades.
Dirigentes y atletas habían manifestado tener esperanzas de que el presidente entrante enviara un mensaje distinto en esta área, mencionando en su discurso su respaldo al deporte y algunas estrategias a seguir para sacarlo del estancamiento que lo deja la administración del presidente Funes, pero nada de esto sucedió.
La preocupación de atletas como Melissa Mikec, de tiro deportivo, Carlos Burgos, de ajedrez y Karen Funes, de ciclismo, es que ya en el desarrollo de su gestión, no haya un decidido y real apoyo para que el deporte nacional se enrumbe por la ruta del progreso en terminos de competencia y resultados.
En similares términos se expresaron los dirigentes como Luis Chévez, de judo, Enrique Molins, de tenis, Pablo Ventura, de béisbol y Carlos Esnard, de tenis de mesa.
No obstante, más allá de que la palabra deporte no fue mencionada en el discurso presidencial, los dirigentes y atletas antes mencionados abrigan la esperanza de que la presencia del vicepresidente Óscar Ortiz, quien se ha visto cercano al deporte, pueda influir para un mayor apoyo a este sector.