Si hay un jugador que quedó en la retina de la afición, del rival y de muchos que siguieron el minuto a minuto de la Selección en Maryland es Henry Hernández, portero del campeón Isidro Metapán. Su actuación fue destacable, ofreció garantías y si tuvo algún error pasa a un lado secundario. Él y todo el equipo mostraron hombrada. El mayor premio fue que la afición aplaudió ese esfuerzo como si hubiesen ganado. No se fijaron en el 2-0 en contra. Simplemente, volvieron a creer en su Selección, un equipo que no valía nada hace meses y que dejó herido el sentimiento del hincha de corazón azul.
Hernández sorprendió a los españoles. Más allá de su actuación en el campo, la mayoría de periodistas (no salvadoreños) cayeron en la cuenta allá por el minuto 19 que quien era titular era él y no Derby Carrillo, quien sí estaba en el listado oficial.
Aclarando esto, comenzó la tertulia del portero de la Selecta con Radio Monumental y EDHdeportes.
“A mí se me informó que iba jugando desde el entreno por la tarde y tenía la certeza que iba a ser titular y estaba metido de lleno en este partido”, dijo.
Cuando le tocó hablar sobre el ambiente que había previo a os juegos, dijo sin morderse la lengua. “Estoy contento, quizá no era lo que todos esperaban que era que nos fuera un poquito peor pero satisfecho porque se trató de mandar un mensaje de que esta Selección quería hacer las cosas diferentes y ante un rival de élite nos paramos con mucha personalidad y carácter”.
El juego se vivió con alta intensidad. España con toda su fama podía amedrentar fácil y la temperatura llegó a estar casi a los 40 grados centígrados. El vapor era insoportable.
“Estaba sumamente caliente, el primer tiempo estuvo agobiante y máxime con la presión y la jerarquía que impone España, sus jugadores están acostumbrados a someter a sus rivales y a manejar los tiempos del juego, nosotros no íbamos a ser la excepción y lo teníamos claro en eso, gracias a Dios en el primer tiempo tratamos de mantener el orden lo más posible, sabiendo que ellos en cualquier momento podían tener un chispazo de habilidad y definir. Pero estábamos tratando la manera de hacer nuestro mejor esfuerzo, de estar bien paraditos tácticamente y en el primer tiempo logramos mantener el 0-0 que fue importante, ellos estaban molestos y se les notaba”, explicó.
Con el cero atrás, Henry se imaginaba a una España agresiva. “Ya en el segundo apretaron el acelerador y la primera que tuvieron la definen. Creo que se hizo un buen partido y se dejó buena impresión contra Costa de Marfil y España. Lo importante es mandar el mensaje que se pueden hacer bien las cosas y que el apoyo debe estar allí”, apuntó.
Para Hernández el orden fue importante en los dos juegos. Sin esa aplicación, la Selecta habría terminado desdibujada. “Fue importante empezar de atrás hacia adelante porque lo que más cuesta es defender y mantener un orden en defensa es muy difícil, máxime cuando se tiene poco tiempo de trabajo y con un técnico con ideas nuevas pero el equipo en un 60%-70% ha trabajado la idea y lo que nos falta del 30% restante nos puede ayudar a ganar los partidos y podemos luchar de tú a tú contra cualquiera si manejamos las transiciones”.
Sus anécdotas
Henry tiene buenos recuerdos del partido. Con Iker Casillas intercambió palabras y hubo intercambio… con Diego Costa tuvo choque pero fue por el mismo calor del juego y porque el delantero del Atlético de Madrid quería mostrarse.
“Es gratificante estos partidos, 90 minutos son muy poco para disfrutarlos pero muy agradecido con Casillas porque se portó muy bien conmigo, tuvimos la oportunidad de intercambiar varias veces palabras, siempre se portó a la altura, me felicitó, me dio su suéter y me puso una dedicatoria. En el partido tuve roces con Diego Costa y tuve altercados porque él andaba molesto y se quería mostrar con goles y lo desesperamos cuando tratamos de controlar el tiempo, ya sea por reclamo o en buena onda se disfruta”.
El portero de la Selecta confía que con planificación vendrá un mejor futuro para la Selecta. Ya se dio el primer paso. “Estamos intentando cambiar esto y qué mejor que dejándonos en la cancha y ojalá que al final los resultados lleguen con buena planificación y sacrificio porque Dios no desampara”.