PORTO ALEGRE. Ecuador y Francia disputarán un duelo se supervivencia y de futuro, que decidirá si el cuadro sudamericano hace historia igualando los octavos de final del Mundial de Alemania 2006 y si el equipo de Didier Deschamps, con casi todos los deberes hechos, evita a Argentina en la siguiente ronda de la competición.
Ahora todo son alabanzas hacia un equipo que ha arrasado en sus dos primeros encuentros ante Honduras (3-0) y Suiza (2-5) y salvo algo extraño, no será primero en la clasificación del grupo.
Necesita una debacle frente a Ecuador para acabar con la segunda plaza, que, incluso podría ser tercera si se diera otra carambola: que Suiza goleara a Honduras.
Por eso, en Francia nadie se confía de un último duelo que debería ser placido a priori. Antes, los hombres de Deschamps conocerán los nombres de los dos primeros clasificados del grupo de Argentina y evitar cruzarse en octavos con el equipo de Alejandro Sabella también es un objetivo de fondo.
Deschamps tendrá que meditar sacar un once inicial con todos los teóricos titulares sin reserva alguna o con dar minutos a jugadores que han disfrutado de menos que el resto. En todo caso, cuenta con dos bajas seguras: la del central Raphael Varane y la del centrocampista Yohan Cabaye.
El primero sufrió una gastroenteritis. El segundo vio su segunda tarjeta amarilla contra Suiza y no jugará el encuentro por sanción.
Además, el otro central del equipo, Mamadou Sakho, arrastra problemas musculares en un muslo y, si finalmente tampoco juega, la pareja de zagueros podría ser Laurent Koscielny y Mangala.
En los laterales también podría haber descanso para Debuchy y Evra, que está apercibido para el próximo encuentro. Aunque Debuchy ha asegurado que quiere jugar, podría dejar su sitio a Digne, mientras que en la izquierda Bakary Sagna tendría una oportunidad.
En Ecuador, solo se maneja un posible cambio. Oswaldo Minda dejaría su posición a Carlos Gruezo, aunque no está confirmado todavía.