A falta de cuatro fechas para que finalice el torneo Clausura 2014, las cosas están que queman a ambos costados de la tabla de clasificación.
Quizás la más caliente es la zona baja, donde cuatro equipos se disputan la permanencia. Firpo, UES, Santa Tecla y Águila, de abajo para arriba, pugnan y sacan la calculadora para hacer números de las fechas que vienen.
Arriba, la situación está un poco más clara. FAS, el líder con 29 puntos, a 11 unidades del quinto, está con un pie en semifinales. Le bastaría con ganar un partido de los que le quedan para decir presente en la penúltima instancia del torneo, claro, el objetivo es pasar como primero, para gozar de la ventaja deportiva que eso supone.
El puntero no tiene un calendario fácil, a priori, pero es muy probable que en alguno de los cuatro partidos que le quedan podrá puntuar para, al menos, estar entre los cuatro primeros. Si gana mañana al Alianza en el Cuscatlán, los tigrillos estarían en la siguiente fase. Si caen, además de darle vida a los albos, aún les quedarían tres partidos, dos como locales contra Firpo y Metapán, en los que podrían buscar el resultado que les de la clasificación. Cerrará FAS de visita en Opico ante otro aspirante a semifinales, Juventud Independiente.
Una derrota de los tigrillos abriría las puestas al vigente campeón, Metapán, que está segundo con 26 puntos, a alcanzarlos en el liderato, si logra derrotar en casa, en esta décimo quinta jornada, a Luis Ángel Firpo.
Si este es el panorama. FAS, aun cayendo en esta jornada de entre semana, tiene asegurado al menos el segundo lugar, pues Juventud Independiente, tercero con 24 puntos, no lo alcanzaría si derrota a Águila en San Miguel y de paso dejaría a los migueleños con las velas encendidas en la parte baja de la clasificación.
El cuarto clasificado, Dragón, con 21 puntos, a tres del quinto, Águila (18), buscará un triunfo ante Santa Tecla de visita y esperará una victoria de los opicanos para que se le empiece a allanar el camino hacia semifinales.
El único equipo que lo podría alcanzar en el último puesto que da la clasificación es su vecino, siempre y cuando se combinen la caída mitológica y la victoria aguilucha.
El calvario
Con Alianza y Dragón preocupados únicamente por la clasificación a semifinales, la parte baja de la tabla acumulada es un valle de lamentos.
El actor principal es Luis Ángel Firpo. Con 32 puntos, el equipo usuluteco pasó, en menos de un año, de ser campeón a estar último, con la seria amenaza del descenso.
Lo único que le queda a Firpo es ganar o ganar. Los tropiezos están prohibidos en los pamperos. Sin embargo, el panorama no se ve apacible para los usulutecos y cada vez están más cerca del precipicio que de la llanura.
Le quedan cuatro finales a los pamperos, tres de ellas de visita, todas, con rivales que ya los derrotaron en la primera vuelta.
Empieza Firpo su vía crucis con Metapán, esperando que la UES, noveno con 33 unidades, no logre sacarle puntos a Marte en casa y que Águila (35) y Santa Tecla (35) caigan en sus partidos de locales ante Juventud Independiente y Dragón, respectivamente.
Aunque en el fútbol se puede dar de todo; los pamperos son conscientes que sólo les sirve sumar de a tres en esta jornada y que sus compañeros de infortunio no lo hagan. O, en el mejor de los escenarios, no puntuar todos y las cosas seguirían igual en el sótano, lo que prolongaría el crujir de dientes.
En el más optimista de los escenarios, Firpo esperará que la UES al menos empate y él sacar los tres puntos en Metapán para abandonar el sótano y superar por un punto a los escarlatas.
Una caída ante los caleros, combinada con una victoria o un empate universitario con los bombarderos, prácticamente sepultaría los esperanzas usulutecas.
Si Firpo logra salir del sótano en esta jornada, aún le quedarían tres partidos duros: FAS en Santa Ana, Juventud Independiente en Usulután y Dragón en San Miguel.
Los universitarios, en tanto, necesitan de dos triunfos más para respirar tranquilos; claro, siempre y cuando los pamperos no consigan ganar los dos próximos encuentros.
Reciben a Metapán en la jornada 16 y se jugarían la permanencia con Santa Tecla de visita en Las Delicias, para terminar haciéndole los honores a Águila en el Universitario.
“Es duro, pero sabemos que podemos y sobre todo queremos salvar al equipo”, dijo el técnico escarlata, William Renderos Iraheta, a radio “Monumental”, el domingo, después de sacarle un importante punto de visita a Dragón.
Con ese resultado, los escarlatas dependen de ellos mismos para rescatar una categoría que, en gran tramo del campeonato, la veían ya perdida.
Santa Tecla aún no está salvo del descenso, mucho menos Águila, que tras sus respectivas derrotas el fin de semana pasada volvieron al infierno y le dieron una mínima esperanza a un Firpo que jura no bajar los brazos, por muy difícil que se le haya puesto el camino de la salvación.
La Semana Mayor puede dejar tres escenarios: dejar las cosas como están actualmente, empezar a aclarar el camino para salvados o condenar a un equipo que, de la gloria, pasó al infierno en apenas unos cuantos meses.