Falta de puntería, postes, intervenciones oportunas de los defensas y porteros evitaron que la máxima emoción del fútbol, el gol, se gritara en las gargantas de los seguidores de Alianza y FAS.
En el llamado “clásico del odio”, todo comenzó mal. Y es que a diez minutos del partido, en la división entre sol general y sombra sur no había elementos de seguridad. Los “seudoaficionados” aprovecharon para lanzar objetos, provocarse y tirar patadas a la malla ciclón que divide los sectores donde estaban los de Alianza y FAS.
La UMO, que ya estaba en el estadio, se trasladó a la zona para que la cosa no pasara a más.
Finalmente, la bola rodó y fue FAS el que mejor la trataba, con más control y profundidad, con Néstor Renderos como hombre clave en la recuperación y salida visitante.
Sorprendió el DT Efraín Burgos, al mandar a Carlos Aparicio por Gonzalo Mazzia. Fue un cambio de último minuto. Se enteró en el camerino el argentino de la decisión técnica, pero Aparicio no fue factor en el partido.
Lo fue más Elman Rivas para Alianza, destructor y creador. Es que el partido fue casi todo ahí, en el centro, con pocas ocasiones, y con la mala suerte de que, cuando sí las generaron, les faltó puntería, o aparecieron los arqueros.
Apenas sobre el minuto 3, Alejandro Bentos se escapó por izquierda y sacó un centro a segundo poste. Ahí se “bañó” el defensa Carlos Arévalo y por su espalda apareció Alex Larín. El volante, el goleador de los tigrillos, improvisó una media tijera para rematar, pero encontró bien parado al meta paquidermo Rafael Fuentes.
Tres minutos después, fue la primera insinuación (no remate al arco) de los locales. Hugo Alejo entró por izquierda, y se quitó la marca de Dony Valle. Luego, barrió en el área, a tiempo, Alex Mendoza para evitar mayores peligros.
Una de las más claras para los locales en todo el partido llegó al 17’. Alejo ganó en un choque sobre Juan Carlos Moscoso, y entró por derecha. Por ahí filtró un balón para Sean Fraser. El más veloz de los aliancistas llegó a tiempo al mano a mano con el meta Luis Contreras, pero no pudo levantar el balón ante la barrida a tiempo del fastaneco, que salvó su valla al cerrar a tiempo los ángulos.
El partido tenía momentos buenos, y varios malos. Vaivenes que no permitían un flujo constante de emoción. Al 21’, fue Renderos, por FAS, el que estuvo cerca, en un remate de cabeza tras un tiro libre que cobró Larín. Y dos minutos más tarde, el “Cacho” Larín probó suerte de media distancia.
Estaba calibrando ese cañón zurdo que tiene, porque al 25’, primero Fuentes, y luego el poste, le negaron el gol. La jugada terminó en un tiro de esquina.
Desde entonces, el partido decayó en profundidad, y prácticamente ya no hubo mayores jugadas de peligro real.
El complemento
En la segunda parte, FAS salió como en la primera, con todo. Aparicio se filtró hasta “la cocina” sobre el 48’, y sacó un pase retrasado para Larín, en el área. Pero el remate de su compañero pegó en la pierna salvadora de Edwin Martínez.
Dos minutos más tarde, el albo Yeladián le “robó la cartera” a Bryan Tamacas, enfiló por derecha. Se recuperó el joven defensor tigrillo, pero en la misma, con un quiebre de cintura, lo dejó el paquidermo, quien luego se quitó a Valle y sacó un remate colocado que entraba por el ángulo opuesto. Entonces apareció Luis Contreras para evitar que se concretara la felicidad de los seguidores del cuadro local. Fue tiro de esquina, y lo elaboró mal Alianza. De contra, no la pudo culminar bien el FAS, con Bentos, por izquierda. No la pudo culminar Aparicio, y cometió falta sobre Osorio.
Era el mejor tramo del partido, de ida y vuelta, de ocasiones claras. Al 56’, otra para los visitantes en una nueva contra. No le ayudaba mucho Roberto García a Rivas en la contención alba. Se fue Bentos de nuevo por la banda, y sacó un centro retrasado que no pudo rematar Jonathan Águila. La bola le pasó entre las piernas, con marca a presión encima.
Siete minutos más tarde, la misma historia. Mal parados los albos. Contra veloz de los santanecos. Bentos se la pasó a Renderos y este, desde fuera de área, probó los reflejos de Fuentes, quien rechazó, pero corto. Por derecha, apareció Águila y su remate dio en el poste.
Alianza respondió con un tiro libre de Yeladián, que fue desviado por un defensa tigrillo hacia atrás. La bola pegó en el travesaño. Solo fue el susto para la visita.
Después de eso, un nuevo bache, largo, de fútbol, que duró hasta los minutos finales. Al 82’, Araujo probó al meta Contreras en un tiro libre. Alianza quería y seguía. De nuevo el mexicano, un minuto más tarde, se escapó por izquierda, en un saque de banda en el que se durmió la defensa visitante. Entró al área y tenía en segundo poste a Sean Fraser. El jamaiquino estaba solo y su alma para rematar al fondo, pero le tiró una “piedra” el azteca. Ni con escalera llegaba el delantero.
Al final, división de puntos que sirven más para FAS que para Alianza. Los tigrillos llegaron a 30 en la general, y mantuvieron la distancia de tres puntos sobre el segundo lugar, Isidro Metapán, a falta de solamente tres fechas.
Mientras que los paquidermos llegaron a 17 puntos, y están lejos de una clasificación, con varios equipos por arriba de ellos y en la disputa del cuarto lugar de la tabla, porque el tercero parece que será de Juventud (25 puntos).