La Selecta lleva siete meses sin jugar, otros tantos sin entrenar y además, como si fuera poco, no tiene entrenador. El panorama no podría ser más desolador, y eso sin incluir el daño que ha causado el tema de los amaños. Sin embargo, el Ranking FIFA de febrero, que acaba de publicarse hoy, refleja algo completamente diferente.
El Salvador mejoró 10 puestos ?ahora es 78- respecto del anterior, sigue ascendiendo en CONCACAF ?superó a Jamaica y Haití para ser 7 en la región-, números que alguien distraído o poco informado podría traducirlo en ?el resurgimiento del fútbol salvadoreño?. Bueno, no es precisamente así? ¿Por qué? Veamos?
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¿Hay alguna explicación para esto? Sí, la hay. Es algo más compleja y analítica que la teoría que circula en las redes sociales ?en tono de broma, pero con muchos adherentes-, que asegura que todo es parte de un amaño orquestado por el exportero Miguel Montes, sobre todo desde que trabaja como auxiliar contable en los Estados Unidos y se especializa en números.
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El Ranking de la FIFA se hace mediante una fórmula matemática, que si bien no es manipulable no siempre refleja la realidad actual de las selecciones. El caso de El Salvador es el mejor ejemplo: muestra a una selección en ascenso, devorando rivales en la región, y todos sabemos que eso no es verdad.
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Lo primero que hay que decir es que el puesto 78 es ficticio, que se han dado varias circunstancias matemáticas para que se dé, pero es insostenible en el tiempo. Casi con seguridad que el ranking de marzo incluso sea levemente superior. Sí, increíble, pasará de 436 puntos de promedio a 438 en caso de seguir inactiva, pero ya en los meses siguientes se desmoronará, con riesgo de quedar fuera del top 100.
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Si El Salvador está 78 se debe, más que nada, al poder que le han dado los 1,037 puntos que logró al vencer a Haití en la Copa de Oro (única victoria en el torneo). Son muchos puntos porque se trata de un partido oficial en competición continental y ante un rival que estaba arriba en el Ranking FIFA. La clave aquí es que sea oficial y no amistoso, porque eso multiplica el valor de una victoria por tres. Ejemplo: en caso de que la Selecta le gane a España en el amistoso de Washington (aun no confirmado), sería una proeza, un resultado histórico que se recordará eternamente? Pero para el ranking solo valdría 597 puntos.
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El Ranking FIFA se confecciona con los resultados de los últimos cuatro años de cada selección, es decir 48 meses. Sin embargo, los juegos más recientes tienen más peso que los jugados en 2012 o 2011. ¿Cómo? Se trabaja con cuatro bloques de 12 meses cada uno. El de los 12 meses más recientes (marzo de 2013 a febrero de 2014) se consideran al 100% para el promedio, a eso se suma el 50% del período 2012-2013, el 30% del 2012-1011 y el 20% de 2011-10).
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Como se puede ver, la clave pasa por lo que ocurre en los últimos 12 meses, ya que eso vale el 100%. ¿Y entonces cómo puede ser que se suba si hace 7 meses que no se juega? Sencillo. Hasta el mes pasado, El Salvador tenía 7 partidos en ese período: 5 derrotas (Paraguay, Ecuador, Venezuela, Honduras y Estados Unidos), un empate contra Trinidad y Tobago (equivale a 298 puntos) y la famosa victoria con Haití (1,037 puntos). La suma da 1,335, que dividido por los 7 juegos da 190 puntos de promedio. A eso luego se suman el porcentaje de los tres bloques de años pasados.
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¿Qué cambia en este mes para que la diferencia sea tanta? El juego contra Paraguay (derrota 0-3), disputado en febrero de 2013 y que significó 0 puntos, dejó de estar en el bloque de los últimos 12 meses. Por lo tanto, ahora esos 1,335 puntos ya no se dividen en 7 juegos sino en 6. Resultado: ahora ya no son 190 puntos sino 222. Y en el próximo ranking, el de marzo, ocurrirá lo mismo con el amistoso vs. Ecuador (0-5), por lo que los 1,335 puntos se dividirán por 5 partidos, subiendo el número a 267.
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Esto es, para ser más explícitos, como si en las notas de un alumno hay un 0, un 1, un 6, un 9 y 8. El promedio sería: 4.8. Pero si por alguna razón quitaran el 0 y el 1, la nota general subiría a 7.6. Eso es lo que ha pasado con la Selecta ahora.
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No son pocos los que dicen, sobre todo en las redes sociales, que la clave para continuar ascendiendo en el Ranking FIFA es no jugar. Y así, a este ritmo, seguir subiendo hasta llegar al top 10. Más allá de la broma, eso es imposible que ocurra. De hecho, para el promedio de cada bloque se necesita un mínimo de 5 partidos jugados en los últimos 12 meses. El que no los tenga, cada partido faltante equivaldrá a partido perdido, es decir 0 puntos para promediar. Será difícil evitar el desplome en los próximos meses.
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Así como ahora El Salvador se benefició porque el partido con Paraguay ya no estuviese en el bloque más reciente, se hundirá cuando ocurra lo mismo, en julio, con el juego contra Haití y los 1,037 puntos tengan menos peso.
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El Ranking FIFA cada vez adquiere más importancia, pero para casos muy específicos. Recientemente, en noviembre, lo fue para determinar los 7 cabezas de serie que acompañaron a Brasil en el sorteo del Mundial. Para El Salvador el único ranking que interesa es el de marzo de 2015, ya que en ese se basará CONCACAF para designar los 6 cabezas de serie de las Eliminatorias para Rusia 2018. Si queda en el top 6 quedará preclasificado, evitará una fase y seguramente tendrá rivales más accesibles? Si queda afuera del top 6, como todo hace indicar, habrá que empezar más de abajo.
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Lo que más suma no es ganarle a un rival de calidad, sino hacerlo en un juego oficial como Eliminatorias o Copa de Oro. De hecho, cuando El Salvador llegó a estar 49 ?su mejor posición histórica- fue porque hilvanó seis victorias consecutivas en juego oficiales. Que estas hayan sido ante Islas Caimán, República Dominicana y Surinam fue apenas un detalle.