Así como el lunes, la esgrima volvió a quedarse en el camino en la competencia de sable individual, esta vez en categoría femenina. Fátima Tobar y Alma Marroquín no pudieron pelear por medallas y tienen que esperar hasta el viernes para intentarlo en sable por equipos.
Fátima Tobar tuvo mejor suerte cuando alcanzó los octavos de final. Si hubiese pasado esta ronda habría asegurado como mínimo la medalla de bronce pero tuvo que pelear contra.
En ronda preliminar ganó 4 combates y perdió en una. El siguiente duelos fueron contra la boliviana Karen Onishi a quien derrotó 15-4 toques. Pero en la ronda de octavos donde debía mostrar su mayor potencial la venezolana María Carreño la eliminó 15-10 toques.
Cuando perdió era visible la tristeza de Tobar. No podía creerlo.”Sé que pude haber dado más pero hay que seguir trabajando porque es una competencia que sigue y hay que trabajar en los errores y mentalmente. Voy a tener que pensar en la derrota y hacer un mejor trabajo. Todavía estamos cansados del largo viaje y no es excusa pero se necesita planificar mejor para tener otros resultados”.
La salvadoreña Alma Marroquín tuvo dificultades en sus combates con un pequeño tirón y un dolor en sus piernas. En la preliminar tuvo registro de dos victorias y tres derrotas. En dieciseisavos no superó a la chilena Isabel Peralta 11-15 y se despidió rápido de la competencia.
“El nivel está bueno, hay cosas que propuse y no salieron. A parte del cansancio no lo pude asimilar pero no es excusa, algo pasó y no puedo explicarlo todavía”, dijo.
Para hoy el esgrima salvadoreño tendrá participación en florete individual masculino y espada individual femenino masculino.