De los goles y los festejos se preocupan otros. Ellos dos serán los encargados de cuidar la portería, quizá el puesto más ingrato del fútbol, también en la modalidad playera. Un error de ellos puede significar un partido o hasta una clasificación. Por eso, requieren concetración máxima, más que ningún otro integrante del plantel. Pero tanto Herbert Ramos y Elioro Portillo, de ellos se trata, han trabajado al máximo para este desafío y están : “Estamos muy motivados, preparados. Nos hemos preparado bien y estamos muy unidos, creo que eso es lo importante”, inicia la plática Ramos. Y enseguida Portillo se suma: “Fue una preparación larga, desde antes de ir a la eliminatoria no se ha parado. Eso nos va a ayudar bastante en la parte física, en la unidad de grupo y en lo colectivo… Esperando en Dios que nos permita hacer lo mejor”.
Ambos comparten cuarto y se llevan de la mejor manera. Hay una sana competencia por el arco salvadoreño. “Somos muy buenos compañeros, estamos en la misma habitación y nos llevamos muy bien. Los dos estamos preparados para ser titulares pero será decisión del DT. Quien lo haga, quien sea el portero, lo tratará de hacer de la mejor manera, por eso nos hemos preparado con todo”, dice Ramos.
Eliodoro coincide: “Ramos es un gran compañero, un gran jugador. Hace las cosas muy bien, nos llevamos de la mejor manera. Esperamos que al que le toque atajar, haga las cosas bien porque será para beneficio de todos y sobre todo del país”.
Sin embargo, hay algo que no comparten: la experiencia. Para Ramos será su primera Copa del Mundo: “Es mi primera experiencia en un Mundial, hablar con la fe en Dios que el profe me de la confianza de ser titular. Y si no, desde la banca también apoyando a todos, estoy muy entusiasmado”, confiesa. Y se le nota.
Para Eliodoro, en cambio, será su cuarto mundial: “Cada vez que vas alcancanzando más resultados, quieres un poco más. Este mundial es muy exigente para nosotros por todo lo que entorna a un país, nos van a exigir cada día más. Pero nosotros estamos claros: queremos alcanzar cada día más logros. El reto es grande”, dice Portillo, en este caso la voz de la experiencia.
La convivencia, aseguran, ha sido fenomenal. “La hemos pasado de la mejor manera, en familia. Realmente, la convivencia ha sido muy linda, estamos motivados y con fe en Dios”, asegura Herbert. Eliodoro agrega que “el equipo es muy compacto. La fortaleza está en la unidad. Tenemos diez días juntos aquí, ha sido muy buen tiempo para poder adaptarse. Si no estamos adaptados así, nunca lo estaremos”, expresa Portillo y deja escapar una sonrisa.
Se viene Argentina. Portillo es el que lo conoce mejor: “Es un rival muy fuerte, hay que respetarlos. El primer juego ante ellos será decisivo. El Mundial pasado pudimos conseguirlo y ahora tenemos que empezar con el pie derecho”. Y no quiere adelantar nada sobre Holanda e Islas Salomón: “Debemos pensar primero en Argentina y luego en los otros dos rivales”.
Ramos coincide en que “Argentina es una gran Selección pero El Salvador es cuarto en el mundo y debemos demostrarlo. Sabemos que con la calidad de nuestros jugadores podemos salir adelante. Nosotros tenemos algo que ellos quizás no tengan pero hay que demostrarlo”.
Portillo confirma que una de las clave serán lo que puedan hacer Tin y Frank: “En las charlas les decimos que a ellos le van todos a marcarlos. Si no la aprovechan ellos, cederán espacios a los otros compañeros que deberán estar atentos”. Y habla del estadio Tahua To’ata, donde tuvieron su única práctica el martes: “Es un estadio muy bonito, que se presta para la competencia. Está para jugar, no vamos a poner ninguna excusa. Donde entrenamos, quizá la arena está más aspera. En el estadio debe estar colada, porque se siente más suave”.
Eliodoro y Herbert están listos. De sus cuatro manos también dependerá el rumbo de esta Selecta playera en su aventura tahitiana.