BARCELONA, España. Sellado ya su pase a la siguiente ronda de la Liga de Campeones, un empate el miércoles ante el visitante Celtic de Glasgow le bastaría al Barcelona para coronarse ganador del grupo H. Pero el equipo dirigido por el argentino Gerardo Martino aspira a algo más que solventar la papeleta frente al campeón escocés.
Los azulgranas lograron revertir el viernes su mala dinámica con una goleada por 4-1 sobre el modesto Cartagena en la Copa del Rey, pero ansían reencontrar las buenas sensaciones del inicio de temporada con una victoria convincente al cierre de la fase de grupos europea ante su público, que empieza a cuestionar la gestión de Martino tras dos malos resultados y un estilo futbolístico que no convence.
Previo al compromiso copero, el Barça perdió en desplazamientos consecutivos a Amsterdam y Bilbao, cayendo por 2-1 ante el Ajax en la Champions y 1-0 frente al Athletic en la liga, donde sigue líder con 40 de 45 puntos posibles, los mismos que ostenta el Atlético de Madrid, relegado al segundo lugar por peor diferencia de goles.
En la competición europea, solo el Milan, segundo con ocho unidades, podría quitarle el primer puesto del grupo, pues el Ajax tiene tres puntos de desventaja respecto a los 10 del cuadro catalán, que ostenta mejor foja goleadora y solo ha perdido uno de sus últimos 24 partidos continentales en su estadio: por la semifinal de la campaña pasada contra el Bayern Munich, eventual campeón.
El Celtic llega teóricamente sobrado de caudal ofensivo al Camp Nou, pues ha endosado 12 goles a sus dos últimos rivales ligueros (siete en cancha del Hearts y cinco al más reciente Motherwell) y manda con amplio margen en el campeonato escocés.
Pero ni la Champions es la Scottish Premiership ni un Barça ávido de triunfos se asemeja al Motherwell.
“Cualquier equipo que pierde dos partidos seguidos enciende la luz de alarma. Tenemos que alejarnos de la posibilidad de un partido cómodo. Todos tienen consecuencias, en este caso más negativas que positivas. En el primer tiempo contra el Ajax retrocedimos en nuestra progresión. A nivel futbolístico aún no estoy satisfecho”, declaró el jueves Martino tras subrayar que “los malos momentos demuestran la fortaleza del grupo”.
En centrocampista Sergio Busquets, por su parte, consideró que “quizás se ha sido un poco injusto con el equipo. No te quiero contar si hubiéramos perdido tres partidos. Se hizo una reflexión, pero el fútbol no es como las matemáticas y se pueden volver a perder dos seguidos”.
Motivaciones locales aparte, el técnico del Celtic, Neil Lennon, anda además pendiente de los problemas físicos que arrastran el centrocampista Nir Biton, el extremo James Forrest y el goleador Georgios Samaras, mientras el medio Beram Kayal y los defensas Steven Mouyokolo y Adam Mathews son baja de larga duración.
Tampoco estará el hondureño Emilio Izaguirre por sanción, igual que el azulgrana Cesc Fábregas, goleador en el partido de Glasgow por la segunda fecha europea, saldado con victoria barcelonista por 1-0.
“Allí y también el año pasado aquí demostramos que podemos competir con ellos”, señaló Lennon, quien también opinó que “pese a perder en Bilbao, el Barsa sigue jugando fantástico. Debemos darlo todo para salir con una buena imagen”.
Martino sigue sin poder contar con el lateral Dani Alves ni el astro Lionel Messi, que se recupera de su lesión en Argentina y con fecha de regreso a competición en 2014, así como el arquero Víctor Valdés.
Debilitado en ambas áreas, el cuadro azulgrana sufrió las ausencias con sus únicas derrotas de la temporada, aunque el técnico rosarino sumó efectivos con la vuelta del lateral Jordi Alba en Cartagena, la puesta a punto de los medios Xavi Hernández y Andrés Iniesta, y espera que los 10 días de descanso de que ha gozado el brasileño Neymar aseguren mejores prestaciones de las que ofreció en Bilbao.
En su primera visita al estadio San Mamés, Neymar fue más noticia por sus constantes resbalones y eventual cambio de tacos que otra cosa, y el brasileño ve en la visita del Celtic una estupenda oportunidad de repetir su primera gran actuación como barcelonista cuando, sin Messi sobre la cancha, alimentó expectativas con su dinámico juego en el estadio escocés.
Pero el Celtic no despierta tan buenas sensaciones entre el resto de “culés”, pues fue en una visita del equipo verdiblanco en 2007 cuando Messi recayó de una de sus múltiples lesiones musculares; y, en la última la pasada campaña, los azulgranas rescataron un apurado triunfo con gol vencedor de Alba en los descuentos.
El equipo de Lennon, colista del grupo con apenas tres puntos, tan solo aspira a despedirse con buen sabor de la Champions y honrar así un historial que incluye el máximo título continental en 1967.
Otros boletos en juego
Lesionados en el Dortmund y la necesidad del Nápoles
Borussia Dortmund parece no quitarse de encima la maldición de las lesiones.
La derrota 1-0 ante Bayer Leverkusen empeoró por las bajas de Sven Bender y Nuri Sahin, los dos con lesiones en los tobillos. Bender ha sido descartado para el partido en Marsella y Sahin está en duda.
“Queremos pasar el invierno en la Liga de Campeones”, afirmó el técnico del Dortmund, Juergen Klopp.
Neven Subotic, Mats Hummels, Marcel Schmelzer, Ilkay Gundogan y Bender no podrán jugar, y el defensor Manuel Friedrich no está habilitado para la Champions.
El Napoli, por su parte, necesita imperiosamente una ayuda de Marsella para avanzar.
El club italiano podría asegurarse el pase si le gana a Arsenal por tres goles, aunque eso parece improbable frente al líder de la Liga Premier. De no ser así, Napoli debería vencer a Arsenal por cualquier diferencia y esperar que Marsella le empate a Dortmund. O también Napoli podría avanzar con un empate, siempre que Marsella gane.
“Tenemos la ventaja de jugar en casa y tendremos que rendir al máximo”, advirtió el zaguero napolitano Christian Maggio. “Por supuesto veremos qué pasa con Marsella, pero antes que todo tenemos que preocuparnos por nosotros mismos”.
Una desventaja para los italianos: el capitán Marek Hamsik está descartado por un pie lastimado.
Ningún club francés ha terminado nunca la etapa de grupos de la Champions sin puntos. Marsella podría ser el primero en lograr esa dudosa distinción si pierde con Dortmund.
Uno de dos
Zenit o Porto, uno de los dos, avanzará a la siguiente rueda en la Liga de Campeones por el Grupo G. El otro seguirá jugando en la competencia de segunda fila en el continente, la Liga Europa.
Porto, dos veces campeón europeo, enfrenta el desafío más duro con una visita al ganador del grupo, Atlético de Madrid. Zenit será visitante ante Austria de Viena, que no ha ganado ningún partido y finalizará último en el grupo.
Zenit podrá evitar volver a la Liga Europa, donde jugó en la temporada pasada después de perderse los octavos de final de la Champions por un solo punto, si por lo menos iguala el resultado del Porto.
Por su parte Porto debe vencer al Atlético y esperar que Zenit deje escapar puntos en Viena para avanzar. Si Porto y Zenit igualan en puntos, los rusos avanzarán porque tienen mejor resultado en los encuentros entre sí.
Zenit terminó con un punto de ventaja sobre Porto hace dos temporadas para desplazar al campeón portugués a la Liga Europa.
Transferencias en enero
Basilea y Schalke se enfrentan el miércoles y los alemanes, terceros, deben ganar para impedir que los suizos se sumen a Chelsea en la clasificación.
El primer puesto todavía no está decidido, aunque Chelsea se lo asegurará si vence a Steaua Bucarest en Stamford Bridge.
Pero Basilea tiene más en juego que avanzar a la etapa eliminatoria de la Champions por segunda vez en tres temporadas. Si el campeón suizo pierde, sus notables futbolistas jóvenes Mohamed Salah y Fabian Schaer probablemente serán buscados por clubes alemanes e ingleses en la ventana de transferencias de enero.
Basilea solo necesita un empate para avanzar y de ese modo aumentar la probabilidad de retener a sus promesas para su campaña en la Liga de Campeones y para aspirar a su quinto título nacional consecutivo.
Hace dos años, Basilea le ganó a Manchester United en el último partido de la fase de grupos para avanzar en vez del gigante inglés. Cuando enfrentó a Bayern Munich en octavos de final en febrero, ya había convenido transferir al delantero Xherdan Shaqiri al equipo alemán. Pero Shaqiri se quedó durante el resto de la temporada y, antes de pasar a la liga alemana, Salah fue reclutado de Egipto para sustituirlo. Los goles clave de Salah en los dos partidos contra Chelsea lo han puesto en la mira de muchos clubes.
Chelsea Vulnerable
Chelsea tiene una defensa bastante vulnerable en la Premier. Los Blues han concedido 17 goles en la liga, dos más que durante toda la primera campaña del técnico José Mourinho cuando el equipo ganó el título 2004-05. Chelsea ha permitido tres goles en cada uno de sus dos últimos partidos ligueros: una victoria de 4-3 sobre Sunderland y una derrota en Stoke por 3-2 el sábado.
“En los dos últimos partidos hemos permitido demasiados goles”, admitió el defensor Gary Cahill. “Eso no es característico de nosotros y se debe a errores individuales. Quizás sea un poquito de mala suerte pero evidentemente, fuera de casa, tenemos que ajustarnos”.
Los problemas de Chelsea no se limitan a la defensa, sino también sus delanteros parecen estar con poca puntería.
Fernando Torres, Demba Ba y Samuel Eto’o no conectaron un solo disparo certero contra Stoke y solo han anotado cuatro goles entre ellos en la liga y cinco en la Champions.
“Los delanteros hacen sus mejores intentos, de modo que no sé qué hacer”, afirmó Mourinho.
Balotelli y Kaká regresan
Después de unos meses difíciles para Mario Balotelli, el delantero del AC Milan empieza a mostrar señales de que está de vuelta a su mejor nivel.
Balotelli marcó dos goles en el empate 2-2 del sábado contra el Livorno en la Serie A para elevar su cuenta a cuatro goles en sus últimos tres partidos del Milan, con lo que cortó una racha de ocho partidos con su club y su selección en los que no había podido encontrar el fondo de la red.
Balotelli ha anotado seis goles en 10 partidos de liga, así como tres en la Liga de Campeones.
El regreso de Balotelli a su mejor forma llega en un momento oportuno para el Milan, que languidece en el octavo lugar en la liga después de conseguir apenas una victoria en siete partidos.
“Sabemos exactamente el tipo de futbolista que es Balotelli”, dijo su compañero de equipo Sulley Muntari. “Sabemos cómo nos puede ayudar, sabemos su fuerza y habilidad en el campo. Cuando quiere, Mario sabe cómo ser decisivo en los partidos, es como Ibra (Zlatan Ibrahimovic). Balotelli está en esa categoría, las cosas dependen de él. Cuando Mario decide hacerlo bien, siempre lo hace bien”.
Kaká, por su parte, sigue impresionando en el AC Milan después de regresar al club tras cuatro años difíciles en el Real Madrid.
El brasileño ha encontrado el fondo de la red cuatro veces esta temporada y ha anotado 99 goles en sus dos periodos en Milán.
“Realmente siento que la camiseta del Milan es como una segunda piel para mí”, dijo Kaká. “Yo soñaba con vestir esta camisa y espero poder hacerlo por muchos años más. Extrañaba el ambiente del campo de entrenamiento del Milan, la historia del club”.
“Espero marcar mi gol número 100 lo antes posible y sería bueno hacerlo ante el Ajax”, añadió el astro brasileño.