Nuestra abanderada en estos Juegos Bolivarianas quedó al margen de una medalla en la prueba de 400 metros libres. Rebeca Quinteros no la pasó bien en la ronda de los clasificatorios y en la final no logró estar en los primeros tres lugares.
Compitió a doble jornada en el polideportivo Mansiche en Trujillo con muchas expectativas. A primera hora le tocó estar en la serie 1. Fue cuarta y última con un registro de 4:39.68. Estuvo a cinco segundos de la mejor clasificada, la chilena Krisel Kobrich y por cuatro segundos entró entre las ocho mejores ya que superó a la boliviana Alondra Castillo.
Ya en la final no cambió su historia. Finalizó otra vez última (octava), esta vez con tiempo de 4:36.97. Pero hay algo que reconocerle, era la más joven de todas con 15 años.
Su compañera Celina Márquez le tocó ser una expectadora y pese a entrenar fue informada que sus pruebas de 200 metros dorso y 50 metros mariposa están programadas para el lunes.
Quien pasó una situación incómoda fue Marcelo Acosta. Había confusión total. En 800 metros libre aparecía en el listado sin un tiempo de referencia y poco importó el reclamo del entrenador de natación ya que no se respetó el reporte enviado por COES donde se fijaba que Acosta había alcanzado un tiempo de 8:27. En su serie, Marcelo había alcanzado el segundo mejor registro con 8:34:27, casi tres segundos abajo del colombiano Chris Orjuela. Se prevé que habrá solución al respecto para que aspire a la final.
De esta delegación, el último en sumarse, fue Rodrigo Suriano quien viajó desde Estados Unidos. Llegó este domingo por la mañana y horas más tarde estaba entrenando pese al cansancio ya que quiere luchar por medalla en 100 metros dorso.