Gran fiesta se vivió el sábado pasado en Trujillo, Perú, por la inauguración de los XVII Juegos Boliviarianos. Once países competirán desde hoy por 14 días para repartirse cerca de 1,230 preseas.
El Salvador, uno de los cinco invitados especiales en estas justas, fue el quinto país en salir a la pista para desfilar. Fue el grupo más pequeño con siete delegados, tres de ellos atletas. Pero eso no importó. El cariño de los peruanos fue incondicional. Y nuestra abanderada fue Rebeca Quinteros de natación.
El estadio Chan Chan, que está diseñado para albergar a 5 mil personas, estaba lleno y en los alrededores hubo personas que no pudieron ingresar.
El evento tuvo la importancia debida ya que estuvo presente el Presidente de la República, Ollanta Humala Tasso, quien dijo “El sueño de la integración de Simón Bolívar comienza con el deporte”. José Quiñónez, presidente del comité organizador, valoró que en su primer discurso Humala se comprometió apoyar estos juegos y cumplió al inaugurarse más de diez escenarios deportivos y reconstruir tres para una inversión de 50 millones de soles, indicó.
Lo mejor de la gala fue cuando se presentaron los actos artísticos con bailes autóctonos y danza de la cultura inca. Todo un show con luces y música.