Islas Salomón se tomó bien al suave este choque clave con la Selecta por el pase a cuartos de final. Al menos, esa fue la sensación que dio. Un día antes del partido, su entreno se limitó a jugar fútbol-vóleibol frente a Estados Unidos, la campeona de Concacaf que ya fue eliminada en la segunda fecha. Trabajo exclusivamente recreativo. A un costado, tirado sobre una palmera, observaba tranquilamente a los jugadores su ex compañero y hoy director técnico de ese equipo, Gideon Omokirio, todo un personaje.
Ayer, los salomonenses dieron otra muestra de su ? cómo llamarla? ¿Displicencia? ¿Confianza extrema? ¿Comodidad? Nadie lo puede asegurar con certeza. Lo cierto es que los jugadores se pasaron la mañana jugando a los naipes en sus habitaciones donde no faltó el humo de los cigarrillos. Sí, fumaban tabaco en la previa de un partido tan trascendental.
El técnico también estaba relajado. Se había pautado en el desayuno un enlace para el programa radial ?El Desempate?, pero de repente desapareció? Hasta que un jugador fue a buscar a este enviado y lo llevó hasta la habitación del entrenador. ?Aquí hablaremos más tranquilos?, dijo, mientras se recostaba sobre un sillón.
Islas Salomón es una potencia en Oceanía en el fútbol playa, donde pasan a sus rivales por arriba. Es su quinta participación en la fase final de la Copa Mundial de Beach Soccer, aunque llegaron a este Mundial de Tahití sin haber superado nunca la fase de grupos.Inclusive, el propio técnico Omokirio le hizo dos goles a la Selecta en el partido del Mundial de Marsella 2008. Parece que, a veces, le va bien con su forma relajada y tranquila de esperar los partidos.