El número 10 ya es una realidad para El Salvador en los Bolivarianos. Fue en la sede de Chiclayo con el ciclismo. Karen Cruz fue la artífice en la modalidad de keirin al finalizar primera. No había tiempo para esta competencia pero cruzó la meta y logró podio.
Horas antes, Karen también pudo haber soñado con otra medalla de bronce en los 200 metros en velocidad pero fue cuarta con tiempo de 37.900.
Ella fue sincera, no podía creerlo. Hasta que le anunciaron oficialmente que era tercera lo pudo creer.”Estoy bastante emocionada y no termino de salir del asombro, cuando vi mi nombre en el papelito y me llamaron para el medallero ya lo podía creer, ahora estoy disfrutándo, sigo bastante contenta, queria una medalla en 200 metros velocidad pero se me dio en keirin, así que gracias a mi mamá y a mis patriconadores”. Para ella “el Comité Olímpico (COES) nos permitió estar en los Juegos Bolivarianos”.
Cruz fue felicitada por competidoras rivales, un buen detalle que valora. “Como tengo buena relación con Colombia y Venezuela me felicitaron y me dijeron que había hecho un buen trabajo”.
En cuanto a si se veía con opción a medalla en keirin indicó “Si estaba para la pelea pero podía ser más rápida mi rival y estaba en duda pero gracias a Dios se dieron las cosas aquí con la medallita de bronce”. “Normalmente cuando corres y no logras clasificarte sí (te entristeces) pero es una ganancia siempre cuando se logra el fogueo porque nos permite crecer técnico táctico pero si se agarra medalla espectacular y el gane está para el ciclismo de pista porque por primera vez se agarra una medalla en femenino. Es un logro muy chévere para nosotros y competimos contra rivales muy fuertes”.
Cuando no logró dar el tiempo en los 200 metros velocidad dijo “no pude ante la velocidad de la venezolana pero di mi maximo esfuerzo, estaba peleando por la medallita, me claisifiqué cuarta y espero que para la prócima me vaya mejor, no tengo nada de que quejarme”.
Cuando compitió con Debby Landaverde en velocidad por equipos no clasificaron pero la satisfacción y confianza nunca se perdió. Bien por El Salvador con su décima medalla.