SAN SALVADOR. Quinientos partidos en Primera se dice fácil. Jugarlos es histórico. Ese es el caso de Ramiro Carballo, el zaguero de Universidad que el sábado ante Metapán cumple esa cantidad de juegos, y por lo que recibirá un homenaje previo al encuentro.
“Agradecido con Dios con esta oportunidad que me ha dado, primero de ser futbolista y luego llegar a esa cantidad de partidos y esperando que sean muchos más. Y sigo con la misma ilusión de cuando debute en Liga mayor”, expresó el zaguero salvadoreño.
Carballo arribó al fútbol de la primera división en 1997, en Alianza, procedente de las reservas de este equipo. Desde esa fecha se ha mantenido en la elite, vistiendo además las camisas del extinto San Salvador, Metapán y ahora con la Universidad.
De los cuatro equipos donde jugó Carballo, solo con los albos y caleros logró el título. Con los panteras se quedó cortó y con la UES considera que tiene esa cuenta pendiente, la cual espera lograr: “No es pecado soñar, ni pensar en grande, pero siempre que se haga con los ‘piecitos’ bien puestos en la tierra”, mencionó.
Ramiro no se pone una fecha de retiro, tampoco una meta de partidos: “Mientras tenga las fuerzas físicas y la voluntad de seguir jugando, seguiré en esta profesión”.
Carballo, además de ser jugador profesional, también es licenciado en sicología y es dueño de una farmacia. Todo esto demuestra el ejemplo en que se convirtió tanto dentro como fuera de la cancha.