La noche del sábado estará llena de alegría y tristeza. El estadio Óscar Quiteño será el escenario donde se definirá al primer finalista del Clausura 2013. FAS, claro favorito antes de disputarse esta serie semifinal, está contra las cuerdas por su derrota en la ida (2-1) contra Juventud Independiente.
Para revertir esto y asegurarse un lugar en la máxima fiesta del domingo 26 sólo tiene una fórmula: ganar. No importa el marcador. Le bastará un 1-0 para que el conjunto tigrillo sueñe con la copa 18.
Juventud Independiente tiene dos opciones para seguir abriéndose brecha en un torneo pletórico: ganar o empatar.
Pero estas últimas dos posibilidades son un auténtico desafío para una institución que siempre ha salido cabizbajo del Quiteño.
Ya son seis los partidos donde salir vivo de Santa Ana se ha vuelto un imposible, tras registrarse los resultados 2-0, 3-0, 2-1 y tres resultados consecutivos por 1-0.
En este último duelo, por la fecha 18, ?Juventud? acarició dos cosas: pudo llevarse un empate por primera vez y esto le habría evitado el dolor de cabeza de jugar un partido extra. Pero el portero Óscar Arroyo atajó un penal a Christian Esnal.
Los de Opico tienen que aplicarse para que el Quiteño no se convierta en un infierno.
Hay una estadística que es de doble filo. Si ?Juve?, un novato en estas instancias, no le conviene es que FAS encuentre un gol. Pero en los últimos siete encuentros entre ambos equipos, FAS siempre marcó al menos un gol.
William Osorio ha decidido para este juego volcar un equipo netamente ofensivo. Ante la ausencia de Juan Carlos Moscoso, lesionado del talón de su pie izquierdo, correrá la banda izquierda Alexander Larín y en el mediocampo se prevé que en lugar de Wil Castillo, jugador de marca, esté Jorge Morán, quien sabe realizar una función mixta.
Juventud, de acuerdo al técnico Juan Ramón Sánchez, poblará el mediocampo para asegurar la posesión del balón. Si en otros partidos salía con dos atacantes, esta vez se quedará en el banquillo de suplentes Irvin Valdez y por él llegará Darwin Cerén.
Este será, sin duda, un partido emotivo para un jugador de FAS que anunció su retiro, Cristiam Álvarez. Aunque no saldrá en el once inicial, está convocado y espera ver minutos para despedirse de la hinchada tigrilla.
Álvarez sabe que es su última presentación en el Quiteño pero no desea que cerrar su carrera allí si no en el estadio Cuscatlán, de concretarse una hipotética final.
Además FAS tiene motivos para no confiarse. En sus últimas tres semifinales, quedó eliminado y hecho un mar de lágrimas. En el Apertura 2011 fue despachado por Once Municipal, en el Clausura 2012 fue derribado por Isidro Metapán y en el Apertura 2012 no le alcanzó ante Alianza.
Juventud podría ser su cuarta pesadilla al hilo ya que no tiene nada que perder y mucho que ganar. Pero quedan 90 minutos para dar un veredicto final. ¿Quién pasará?