El Atlantis Fantasy Island Resort, un impresionante complejo de hoteles en Nassau, Bahamas, es el cuartel general del Premundial de Concacaf, el primero que se realiza en un país caribeño en la historia. Y el lugar, colmado de tiendas exclusivas, lujosos restaurantes, piscinas, casinos, tiendas de alta costura y demás, ha arropado con todo el calor bahamense a la Selecta Playera, que rehuye de toda distracción y está bien concentrada en su misión: Lograr un boleto a lo que sería una cuarta copa del mundo para El Salvador, en la modalidad del fútbol playa.
Esta vez será más díficl, porque hay 11 selecciones participando. Una cifra histórica. Además, los rivales ven a El Salvador como uno de los favoritos, después del cuarto lugar conseguido en Rávenna 2011.
Rudis Gallo lo sabe bien. El técnico de los “guerreros playeros” es amable con los medios, pero acepta que hay presión, que hay tensión, y no quiere que sus muchachos piensen en otra cosa que no sea arena, fútbol y goles.
“Será una eliminatoria muy difícil, cerrada. La cantidad de equipos se ha incrementado de cuando iniciamos en 2007 (solo eran cuatro), eso te vuelve más complicada la clasificación”, analizó el entrenador. “Esperamos que las cosas nos salgan bien. Se está manejando que el favorito puede ser El Salvador y México, pero independiente de eso, confiamos en el trabajo que hemos hecho, y le vamos a poner alma, corazón y vida para sacar los resultados. Dentro del terreno de juego se va a ver quién es el mejor”.
Para Gallo, puede hacer diferencia, para bien, la excelente preparación que ha tenido el grupo. “Luego de volver de Rávenna, Italia (septiembre 2011), no hemos parado los procesos de entrenamiento, sea para eventos en nuestro país o fuera de El Salvador. Eso ha fortalecido a la selección, porque ha ganado un poquito más de respeto y ha ganado un roce internacional”, consideró, después de jugar en los Bolivarianos de Playa y participar en cuadrangulares en nuestro país, frente a oponentes como España, Paraguay, Uruguay, Perú, Costa Rica y Guatemala, entre otros.
Arenas blancas
La cancha del Malcom’s Park cumple las condiciones de Beach Soccer Worldwide para este Premundial. El estadio principal es para unas 500 a 700 personas, recientemente inaugurado a finales de 2012, y es el primero de la modalidad construido en el Caribe, con un importante aporte económido de FIFA.
Pero, hay que decirlo, no es mejor que los anteriores en Puerto Vallarta, y era incluso mejor la instalación de la última Cuadrangular Pílsener realizada en Costa del Sol en nuestro país. La diferencia es que el estadio bahamense es permanente… Mientras que, en El Salvador, aún no han sido construidos los dos estadios, prometidos por el Gobierno en 2011.
Más allá de esto, el escenario está listo para la eliminatoria de Concacaf, en canchas con arenas blancas, algo que podría afectar un poco a los salvadoreños, según explicó Frank Velásquez.
“El tipo de arena es muy clara, y aveces te jode la vista, porque no estamos acostumbrados. Mientras vas corriendo se te va quitando, pero ya al entrar molesta algo”, explicó el 11 nacional. Sobre el tema, Gallo no quiso dramatizar: “en Marsella y en Dubái, las arenas fueron bastante similares. Considero que no es nuevo para nosotros, hemos andado en otros eventos internacionales, y las características son similares a las de nuestro país”.
Así que todo listo. Concentración al máximo, compromiso a mil. La Selecta Playera se pone atlántica y mañana comienza su conquista del Caribe. El primer rival es Jamaica. La ruta a Tahití 2013 está por iniciar.