Alexandre Soares, brasileño, ganó cuatro títulos mundiales con la “canarinha” de fútbol playa. Es una leyenda viviente de este deporte. Voz autorizada. Hoy dirige a Trinidad y Tobago, y en la conferencia de prensa en Malcolm Park, sede del Premundial de Concacaf que inicia mañana, solo tuvo alabanzas para la Selecta de El Salvador.
“El Salvador es, junto a México, los dos equipos más poderosos de la competición. El Salvador es el que más se ha desarrollado en los últimos años, ha ido a tres mundiales. Sus jugadores son especialistas en el deporte, eso hace que con el trabajo de un buen entrenador formen un gran equipo”, dijo el sudamericano.
Así lo ve también Ramón Raya, DT de México, quien considera que la Selecta Playera “es un ejemplo. El Salvador no ha tenido mucho éxito en césped, pero viene de tener un cuarto lugar mundial en fútbol playa, y con ese resultado ha logrado mucho apoyo, y ahora es uno de los equipos que tiene mejor respaldo y preparación en la región”, señaló.
“El Salvador tiene un gran potencial, con jugadores jóvenes que nacieron en el fútbol de playa y crecieron y fueron desarrollando, hasta conseguir lo que son hoy. No nada más tienen a uno de los mejores equipos de la región, sino que tienen jugadores, como Frank, que ya han tenido trofeos a nivel mundial. Junto con los buenos resultados viene una responsabilidad, que creo que su entrenador, Rudis (Gallo), que es muy inteligente y que ha sabido hacer las cosas bien, sabrá poner todo junto para demostrar que entienden el lugar que ocupan hoy en el mundo”, reflexionó Raya.
No se quedó atrás el brasileño Roberto Ceciliano, coach del anfitrión Bahamas: “El Salvador es un equipo que creció muy rápido, cuenta con jugadores que solo hacen fútbol playa, y eso es importante en este deporte. Es un equipo que viene participando muy fuerte, y en los últimos tres eventos ha sido muy competitivo”, valoró.
Ceciliano destacó el trabajo del técnico nacional Rudis Gallo: “Siempre está buscando algo diferente y no estar con el mismo sistema táctico. Felicito a El Salvador por el equipo que tienen, así como a México”.
Finalmente, consideró que una de las claves de los salvadoreños es que “no son jugadores que ya viejos y cansados del pasto vienen a jugar fútbol playa, sino que desde jóvenes vienen compitiendo fuerte en esta modalidad”.
Está claro. El Salvador es favorito, rival a vencer. Respeto, hay. Ahora, hay que refrendarlo en la cancha.