“Vi una acción la noche previa, que no tiene nada que ver con esto (posibles amaños), que hubo un jugador que se escapó de la concentración”. Habla Esteban Coppia, preparador físico de la Selecta en 2010, quien ofrece un indicio hasta ahora desconocido: El jugador en cuestión, Ramón Flores, titular en el 2-1 en contra ante EE. UU., habría salido del hotel el 23 de febrero de 2010, el día antes del encuentro en el Raymond James.
“Ese jugador fue reemplazado en el segundo tiempo, porque salió acalambrado. En el momento fue desafectado y no lo convocamos nunca más a la Selección mientras estuvimos nosotros, tratando que cada falta disciplinaria fuéramos lo más contundente posible, para dejar una huella de buen comportamiento y profesionalismo”, narró.
En ese partido solo hubo dos cambios. Abandonaron Ramón Flores y Osael Romero. Este último continuó siendo llamado a Selección. Flores, nunca más.
Guillermo Rivera, quien era auxiliar técnico de la Selecta entonces, confirmó: “Por eso fue que (en el próximo partido del 3 de marzo de 2010) ante Guatemala, en Los Ángeles, ya no se le incorporó (a la convocatoria). De que se escapó… yo hasta después me di cuenta. Había rumores de que había hecho actos de indisciplina, y ya no apareció en la lista del profe” José Luis Rugamas, contó Rivera.
“Yo no me di cuenta. Si lo hubiera sabido, llamo de frente al jugador y le pregunto”, explicó Guillermo. El Diario de Hoy consultó al técnico José Luis Rugamas sobre esta situación. “Solo recuerdo que fue un acto de indisciplina pero nada más”, dijo.
EDH también buscó la versión de Flores, quien desmintió que se haya escapado de la concentración del hotel.
“No es cierto, para nada, ahí estuve con el grupo (en el hotel). ¿Para qué voy a seguir hablando de eso? Si en verdad uno está en lo que está”, se defendió. Al comentarle que es Coppia quien señala sobre esta fuga, respondió “díganle que lo compruebe. Yo estuve con un amigo, sí, pero él llegó al hotel. Yo en ningún momento me he escapado”.
¿Y por qué no le llamaron más a Selección? Según Ramón, “después del viaje (a Tampa), me dijeron que por Julio Martínez, que regresó de la lesión”, respondió.
En todo caso, Coppia explicó que no informaron a la Fesfut de lo ocurrido con Flores: “Esas cosas no se reportan. Simplemente no lo llamamos más, creíamos que era lo más conveniente, tratamos durante el año que estuvimos de sanear la Selección, llegaron nuevas caras. Si se comprueba que un tipo vendió un partido, está vendiendo a su selección, a su patria. No hay que tenerle ningún tipo de contemplación. Está jugando con el sentimiento de un país”.