La joven ciclista Debbie Landaverde sufrió el luens 10 de junio un lamentable accidente mientras realizaba su entreno diario, tras estrellarse contra una torre de polín, que hace un mes fue colocada incorrectamente al interior del Velódromo Nacional, con la autorización del administrador del Complejo Deportivo El Polvorín, Manuel Rosales.
Cuando dicha torre se instaló al interior del velódromo, según lo explicó Manuel Rebollo, encargado de prensa de la Federación de Ciclismo, ellos sugirieron en primera instancia a Rosales, que dicha torre de polín debía ser retirada, primero porque se convertía en un peligro para los ciclistas que ahí entrenan y además porque era algo anti estético, pero el administrador se mostró indiferente.
?Ante esta actitud, como federación me consta que en repetidas ocasiones la FSC por medio del gerente , Héctor Rivas, le pidió al señor Rosales administrador del complejo, que quitaran dicha estructura que abastecía (digo abastecía por que fue retirada), de agua a un sector en el área de natación por el peligro que representaba dicha torre, lastimosamente se hizo tarde?, afirma Rebollo.
INDES lo supo
Rebollo detalló que él, personalmente le hizo ver el problema al gerente técnico del Instituto Nacional de los Deportes (INDES), Rubén Quintanilla, pero que éste solo se limitó a decir que ?si les estorba que la quiten?.
?Tras la tardanza, se preparó una carta con material fotográfico y el lunes 10 de junio, cuando ocurrió la caída de Debbie, se envió a Indes, la carta con todo el análisis técnico que yo les hice, previendo el peligro que significaba para la integridad de los ciclistas dicha torre, lamentablemente la reacción fue tarde, pues fue necesario que sucediera el accidente para retirar dicha torre?, dijo.